“Los precios que se pagan hoy por las obras de arte en el mundo son absurdos”

Con el ‘boom’ de la tecnología, profesiones como la del artista están teniendo cambios radicales: las obras que involucran lo digital y los nuevos medios se han vuelto más populares, tanto, que sus precios de venta se han disparado. Sobre esto habló el veterano artista Juan Montoya, que inició su carrera en los años 70 y ha sido testigo de la transición estética en este nuevo orden.

Montoya, que en este momento está exponiendo su obra en la galería La Cometa, opina que los precios de las obras que se han visto este año son exagerados, habla sobre el papel que juega el dolor y la destrucción de ideas en el proceso creativo. También da una visión sobre lo que es el negocio de arte hoy en día y dice que los jóvenes deben concentrarse en una especialidad si quieren tener éxito en la industria.

¿De qué se trata esta exposición?
La idea en general es combinar lo que son muebles con arte y cómo se puede jugar entre el objeto y la parte del colorido o simplemente la falta de color de un cuadro, y cómo se puede combinar y crear una escala, para que haya un diálogo entre los dos.

En la gente que viene a ver su obra se generan muchas inquietudes, precisamente porque el mundo del arte ha venido cambiando mucho, ¿cómo ve actualmente la industria?

La industria del arte en primer lugar es una inversión muy importante hoy en día, y se ha visto a nivel internacional en todos los periódicos y revistas los números tan absurdos que esta trayendo el arte. Por ejemplo, se acaba de vender un Beacon por US$45 millones, se acaba de vender un Wright por US$35 millones. Los precios son absurdos, pero fuera del valor neto del cuadro o de la obra o escultura, lo que yo he querido hacer en Colombia es mostrarle al público la combinación de lo que es objeto como mueble funcional y tenerlo en cuenta cuando esta exponiendo un cuadro y la relación de ese cuadro con el objeto.

En el arte también hay que tener en cuenta que los espacios donde la gente vive se han modificado muchísimo, los espacios han cambiado, se han reducido, la gente no tiene tanto espacio como en las grandes casas y fincas. ¿Cómo involucra eso en su proceso creativo?
Hay dos partes: una es lo que esta pasando en Colombia hoy en día, se le da mas importancia al hogar y a los espacios. La arquitectura de hoy va en sentido de qué es el espacio interior y cómo se juega el espacio interior, no solamente de lo qué es la fachada del edificio. Entonces cuando hablamos de un espacio interior hablamos de cuáles son las alturas y cómo ese objeto se puede integrar con el espacio. Entonces hay esa conexión y yo creo que es muy importante analizarlo bajo ese punto de vista de si ese cuadro va a estar integrado dentro del espacio.

En el negocio del arte ahora hay mucha más información para los compradores, se puede comparar con otros países, a través del internet. ¿Eso modificó como se manejan los precios e inversiones?
Eso tiene muchísima importancia porque hoy en día tenemos acceso a todo. Y realmente podemos ver por internet si el cuadro va ser una inversión o no, de modo que muchas a veces a mis clientes los aconsejo, no solo en muebles, en tapices, o telas, pero también en términos de arte. Considero que ellos puedan tener en su espacio algo relacionado no solo con el valor del cuadro, sino también con el potencial que pueda ver en el futuro.

Para la gente que esta comenzando a trabajar en esta industria, jóvenes y estudiantes, viene un mundo diferente al de ustedes, porque las cosas se van modificar mucho hacia lo digital. ¿Existe la posibilidad para el artista de mantenerse en lo manual?
Sí, yo creo que es muy importante para el estudiante o artista que comienza que de verdad se empape y que sea una pasión, que no sea simplemente el dólar que esta marcado o el peso. Que haya una pasión por el arte para que puedan surgir, y que el día de mañana ese objeto no sea simplemente pintar, sino que se convierta en algo positivo, que tenga una ganancia en el futuro.

Para una persona como usted que es creativa y esta pensando todo el tiempo en nuevas cosas y diseñarlas, ¿también hay una parte dentro del proceso creativo de destrucción, de cortar cosas que no le gustan, de revisarlas? ¿Hay temas dolorosos?
Siempre tiene temas dolorosos, porque es un proceso de crear y eliminar. Para mí hay días y noches que estoy construyendo y destruyendo al mismo tiempo. De modo que cuando llego al papel es con un idea fija de cómo va a ser, porque yo sueño en una forma tridimensional de modo que eso hace que al final todos los objetos y elementos ya estén colocados.

¿Utiliza herramientas de computador para tener sus ideas?
Utilizo computador porque me ha tocado, pero realmente hasta el punto de vista de dibujarlo más rápido como usar autocad, es mucho mas difícil para mí. Pero puedo hacer “sketches” y en mi oficina los puede interpretar y sacar fácilmente.

¿Le gusta compartir los borradores con alguien más antes de tener una obra definitiva?
No tengo ningún problema. El talento está dentro de mí, de modo de lo que estoy haciendo es compartiendo mis conocimientos y talento con otros, con lo cual no tengo ningún problema.

Por último Juan, ¿cuáles son las variables para que una persona que esta metida dentro de la industria del arte sea exitoso como negocio?
En la parte artística y en la parte como negocio, yo creo que es importante que la persona ya sea un muchacho joven que esté metido en la pintura y esté apasionado. Es decir, que sea una persona que no haga una pintura y mañana haga otra cosa, sino que haya integridad y un seguimiento. La gente que va a adquirir esa obra de arte va a verlo y va a ver el desarrollo que va a tener, que es lo importante.