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Para Tony Bradley, colaborador de Forbes, la combinación de buenas críticas y otras ‘poco entusiastas’ sobre el dispositivo es solo una razón por la que probablemente no debería salir corriendo para ser el primero en su cuadra en conseguir uno.
En una reciente encuesta realizada por TechSpective, casi dos tercios de los encuestados indicaron que planean comprar un smartwatch. Sin embargo, menos del 40% planeaban considerar el Apple Watch como opción; y menos del 8% de los encuestados estaban dispuestos a gastar por un reloj inteligente. Así que eso descarta al modelo más básico de los Apple Watch.
Recuerdo a las primeras versiones del iPhone y iPad. Ambos eran innovadores dispositivos que terminaron por cambiar las reglas de juego en sus respectivos mercados, o en el caso del iPad, crearon de la nada un nuevo mercado. Sin embargo, ninguno de ellos era refinado.
A Apple le tomó un par de versiones poder corregir problemas y evolucionar el hardware y software antes de que el iPhone o el iPad dejen una verdadera huella en los consumidores y se conviertan en los dispositivos dominantes que ahora son.
No estoy sugiriendo en absoluto que no debe comprar un Apple Watch. Solo estoy diciendo que no tiene sentido ser el primero en la fila. Espere a que el reloj salga al mercado y se pueda identificar y corregir cualquier error de hardware o software. La próxima versión del Apple Watch será una compra mucho más segura, especialmente para un smartwatch que no está en un ciclo de actualización de dos años a través de un proveedor de servicios inalámbricos.
Por ahora, hay una serie de smartwatches disponibles, y sus fabricantes ya han realizado un par de actualizaciones y lanzado nuevos modelos para mejorar su producto. Aun así, todavía tienen margen de mejora, lo cual ilustra por qué usted debe esperar un tiempo antes de comprar un Apple Watch. Echemos un vistazo a algunos de los smartwatches actualmente en el mercado y revisemos sus pros y sus contras:
Omate X
El Omate X es elegante y asequible. Aunque sus características y capacidades sean algo minimalistas –similar al Pebble original– este smartwatch tiene el precio adecuado para muchos usuarios. El dispositivo ofrece más apps y funciones cuando se combina con un teléfono Android que con un iPhone, pero en general hace lo que la mayoría de usuarios esperan que haga un smartwatch: hacer y recibir llamadas a través del smartphone asociado, mostrar alertas y notificaciones del teléfono asociado y brindar capacidades limitadas de fitness.
El Omate X no ofrece mucho en lo respecta su valor único. Aparte de decir la hora, no hay mucho que este dispositivo pueda ofrecer que usted no haga en su teléfono inteligente. Esa es la disyuntiva que enfrenta al momento de comprar un smartwatch por US$130.
Burg 12
El Burg 12 hace de todo. Es compatible con un dispositivo iOS o Android, pero también puede tener su propio chip SIM y funcionar como un teléfono inteligente de muñeca por sí mismo. También incluye una cámara, radio FM, y calculadora. Tiene una ranura para tarjetas microSD para ampliar su capacidad de almacenamiento. Además reproduce música y vídeos.
Es voluminoso, debido a la cantidad de tecnología que han metido allí, y más pesado que otros smartwatches. Sin embargo, el peso en realidad lo hace sentir como un dispositivo fuerte y de calidad. Por US$200, es asequible en comparación con un Apple Watch, pero la pantalla táctil es algo extraña y quizás le de ganas de tirarlo contra la pared y maldecir a sus creadores. En otras palabras, usted obtiene todas las características y funciones con este dispositivo, pero no todas funcionan del todo bien.
Samsung Gear 2
Samsung hizo su mayor esfuerzo por anticiparse a la ola del Apple Watch al lanzar una gran cantidad de dispositivos portátiles para la muñeca como el smartwatch Gear 2, uno de los mejores que tiene mucho a su favor. Su precio es US$300, pero en comparación con los otros dos smartwatches de arriba, el Gear 2 es un ejemplo de la frase “la calidad y el precio van de la mano”.
De todos los smartwatches que he usado o revisado, el Gear 2 es posiblemente el mejor. La apariencia del dispositivo, y la calidad de la fabricación son muy agradables. Se ve bien en su muñeca como un reloj –sin importa sus capacidades. El Gear 2 tiene una cámara delantera que puede ser accionada por comando de voz.
El defecto fatal del Gear 2, al menos para un usuario de iPhone, es que requiere un smartphone Samsung y no solo un teléfono Android. El Gear 2 solo funciona por completo cuando se combina con los teléfonos inteligentes de Samsung. Se puede combinar con iOS o Android para cosas básicas como hacer y recibir llamadas, pero todas las características realmente buenas solo funcionan con teléfonos compatibles de Samsung.
Sinceramente, creo que el Apple Watch luce muy bien y estoy ansioso por tener uno, pero no el primero que salga a la venta. Mi recomendación es tener un poco de paciencia y esperar por el Apple Watch 2.0.
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