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Pocas personas se atreven a revelar su salario y, menos aún, conocer cuánto gana cualquiera de sus compañeros de trabajo
El próximo 1 de agosto se cumple un año de la entrada en vigor de la norma europea que obliga a la transparencia salarial. Quizá sepa cuál es sueldo del presidente del gobierno o el de la mayoría de los presidentes de las empresas del Ibex 35, pero ¿sabe cuánto gana la persona con la que hace años comparte despacho o se sienta justo a su lado en el puesto de trabajo? El 'cuánto gano' continúa siendo el secreto mejor guardado y parece que, a partes iguales, hay quien prefiere que así sea y otros hace tiempo no tienen pudor en decirlo.
Yo y mi sueldo
El último informe Tendencias en Beneficios para Empleados de 2023 realizado por Cobee asegura que el 40% de los empleados prefiere que su empresa mantenga en secreto los sueldos para evitar fricciones. Sólo el 13% de las plantillas sostiene que su empresa publica la retribución de todas las personas que forman parte de la empresa; mientras que sólo el 21% cree necesaria esa transparencia, eso sí, de forma anónima.
Borja Aranguren, Ceo de Cobee -plataforma digital de gestión de planes de beneficios- menciona el RD 902/2020 de 13 de octubre, que entró en vigor el 14 de abril de 2021 y que obliga a la empresas a tener un registro retributivo de toda la plantilla, altos cargos y directivos incluidos. "Con esta medida, los legisladores quieren dotar de seguridad jurídica a las personas para comprobar que no hay diferencias salariales por cuestiones de género, raciales, procedencia u otra índole". Hay que recordar que dicho RD no obliga a que haya un registro de acceso público a todo el mundo, pero sí para Inspección de Trabajo o para los representantes de los trabajadores, en el caso de que existan.
Los datos del informe de Cobee genera un debate entre la sociedad y las empresas sobre la conveniencia o no de revelar los sueldos. Según Aranguren "esta situación también se extrapola a la hora de publicar ofertas de trabajo, donde en muchas ocasiones las empresas detallan las características del puesto y lo que se necesita por parte del candidato, pero no se especifica el salario a percibir". Añade que "es evidente la necesidad de definir cómo deberían las empresas trasladar esta información, para que los propios trabajadores y trabajadoras sepan en el rango en el que se mueve su puesto, evitando así posibles casos de discriminación, además de convertirse en un reclamo para conseguir atraer talento y ser más transparentes y equitativos en los procesos de selección".
Mi sueldo es...
El 40,4% de los empleados ya sabe cuánto ganan sus compañeros. Así lo confirma un estudio de SD Worx -proveedor europeo de RRHH y nóminas- para el que ha tenido en cuenta la opinión de 16.000 empleados en 16 países europeos.
Sin embargo, es importante matizar que en cuanto a sueldo no llueve a gusto de todos. La mitad de las empresas que participan en la encuesta comunican de forma abierta su política de retribución y los paquetes salariales, un porcentaje que varía por países. Así el 61% de las empresas polacas e inglesas aplican una política transparente; en España son el 52%; mientras que sólo el 13% quiere que la retribución sea un asunto privado. En Noruega el 30% de las organizaciones apuestan por esto último.
No sé cuánto gano
El informe de SD Worx revela que el 64% de los empleados entiende su nómina, y el 14% tiene problemas para ello. El 27% de los encuestados se ha mantenido en un punto neutro.
Por países, el 23% de los franceses confiesa que no siempre comprende su nómina, y son los finlandeses (76%), los noruegos (74%) y los suecos (70%) los que declaran leer y entender cuánto ganan sin dificultad. En España el 53,5% sabe qué recoge su nómina, el 17% que no lo comprende, un porcentaje que está por encima de la media europea.
En un entorno organizacional, hay momentos clave en los que un trabajador estrella debe salir del equipo, como el caso de Checho Pérez
