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Generar un buen ambiente laboral está entre indicadores más destacados por los trabajadores a la hora es quedarse en una compañía
El pago anual de bonos para recompensar a los mejores talentos es una práctica estándar y establecida que suele ser cuestionada en muchas compañías. Se ha establecido que en EE.UU. tres cuartas partes de las compañías utilizan esta opción, sin embargo, la pregunta que se hacen muchas áreas de talento humano es si en realidad ¿las personas trabajar con más eficiencia solo por más dinero?
Según el psicólogo organizacional Tomas Chamorro-Premuzic en una conversación con Bloomberg, señaló que "la literatura sugiere que el dinero, incluidos los bonos, satisface mucho menos de lo que pensamos y su incentivo es fugaz", y agregó que el ser humano suele responder mejor cuando se reciben otros incentivos que no solo vienen en un cheque.
Es importante mencionar que teniendo en cuenta que actualmente los trabajadores están renunciando a una velocidad récord, los salarios han subido, la flexibilidad está de moda y en el caso de quienes tienen pensando volver a conseguir trabajo sus reglas han cambiado. Algunos reclutadores e investigadores comentan que ahora el proceso de contratación incluye discusiones más francas sobre el trabajo en casa, equilibrando las tareas laborales con las familiares, evitando así el agotamiento.
Entre otros beneficios que destacan, según áreas de talento, el hecho que se les brinde oportunidades laborales de crecimiento, un buen ambiente de trabajo y beneficios flexibles. "También la alineación de los valores del colaborador con el propósito y la cultura organizacional establecidos por la empresa".
Esto es básicamente lo que se conoce como Salario Emocional, una retribución no económica, que busca satisfacer las necesidades psico-socio-afectivas del colaborador" y que influiría más en el comportamiento de las personas.
Según varios estudios que cita Bloomberg se ha analizado que los grandes cheques solo mejoran el rendimiento si se está en la búsqueda de una meta específica, también se encontró que el pago de incentivos alienta a las personas a producir más trabajo, pero no siempre de buena calidad.
“Los colaboradores ya no solo están motivados por el salario o el plan de carrera, estos buscan un ambiente de trabajo propicio para poder explorar todo su potencial a través de experiencias positivas. En conjunto con otros factores, un buen ambiente laboral permite tener empleados motivados, bajas tasas de rotación, altos niveles de bienestar mental y, sin duda, un mejor rendimiento”, concluyó Eliana López, Executive Manager de Michael Page.
En cargos ejecutivos, la brecha salarial es de 17%; en gerencias senior de 7%; y en posiciones profesionales la diferencia llega a 20%
La integridad laboral se ha convertido en un desafío estructural tanto para el mercado laboral colombiano como latinoamericano
