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Si bien un grupo de analistas sondeados por LR argumentó que las principales razones para que la educación de ese país sea atractiva son, el sencillo proceso para acceder a la universidad, sumado al déficit de doctores bilingües y la dudosa eficiencia de los estudios, otros mencionaron que el alto índice de desempleo juvenil español, que ronda casi 50%, impulsa la formación académica interna ante la falta de oportunidades y, por ende, facilita la expansión de la oferta académica hacia América Latina. La principal fuente de oro de la universidad española.
Poseer una tesis doctoral se percibe como una forma de diferenciar exponencialmente una hoja de vida. Y, entre las principales ventajas competitivas por las que los latinos se decantan por realizar su trabajo de investigación en España, según Enrique Forero, presidente de la Asociación Colombiana de Ciencias Exactas, son el idioma común y la oferta académica del país.
“Muchos jóvenes se inclinan por España porque no saben hablar una segunda lengua. Otros, ven los programas ofertados más cercanos a la cultura iberoamericana, sobre todo, destacan las áreas como las Ciencias Sociales, donde la avalancha es aún mayor”, explicó el experto.
Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Educación de España, el número de tesis leídas en las universidades españolas entre 2008 y 2013 se incrementó 40%, de 7.839 a 10.889. Además, de acuerdo con un estudio del diario ibérico El Mundo, que analizó 32 instituciones académicas del país, las universidades españolas registraron al menos 12.100 lecturas de tesis doctorales desde el principio de este año, más de los que se lee durante todo un año.
Por ejemplo, en la Universidad Complutense de Madrid se leyeron 744 tesis entre el 1 de octubre y el 30 de diciembre de 2015 y 1.469 trabajos entre el 1 de enero y el 2 de marzo pasados. Este aluvión de trabajos de investigación responde principalmente al cambio de normativa contemplado en el Plan Bolonia que limitaba el plazo para presentar las tesis de los alumnos de los planes antiguos antes del 10 de noviembre de 2015 y defenderlos antes del pasado 11 de febrero.
De ahí, según el Ministerio de Educación ibérico, 24,9% fueron leídas por extranjeros, es decir, unas 3.012, según cálculos de LR, y 58,8% del total, por estudiantes de América Latina y el Caribe, es decir, unas 1.771 tesis.
En los últimos años, España ha abierto poco a poco sus puertas a los estudiantes latinoamericanos quienes son una fuente importante de ingresos, sobre todo, para las universidades online como, por ejemplo, la Universidad Internacional de La Rioja (Unir) que tiene 24.000 alumnos, de los cuales más de 6.000 son latinoamericanos.
En concreto, el aumento de doctorados latinoamericanos obedece también a un tema económico. “Para una persona de clase media es más barato estudiar en una universidad europea que en una colombiana, donde las matrículas son elevadas, y mantenerse allá también puede resultar a veces más barato que en una ciudad latina”, dijo Alfredo Sarmiento, analista de Educación.
Calidad bajo cuerdas
La calidad del sistema educativo español está en entredicho. No es nuevo el debate sobre la naturaleza de la enseñanza universitaria. Ya la Ocde, que ubicó a España en el número 26 de los 36 países del organismo en materia educativa, evidenció la “ineficiencia” del sistema y requirió la necesidad de evaluar a los profesores que ejercen en la actualidad. A nivel general, las continuas reformas educativas del país, el aumento de la demanda de estudiantes y el fácil acceso hacen percibir la educación española, en líneas generales, como poco exigente.
Según las estadísticas del diario El Mundo, ante la premura y la rapidez de la elaboración de las tesis , el porcentaje de cum lauders bajó en las universidades españolas. Por ejemplo, evidenció que en la Universidad Carlos III de Madrid, 93,8% de las 160 tesis defendidas durante 2014 recibió esta nota máxima. Al año siguiente, fue calificado de esta forma 92,8% de 166 trabajos. En los dos primeros meses de 2016, 88,9% de las 108 obtuvieron esa nota.
Según los expertos, la calidad de las tesis de las universidades debe ser indiscutible. Y el hecho de que los trabajos se entreguen rápido empeora la competitividad en el ámbito internacional.
César Moreno Romero, estudiante de doctorado de estudios sociales de la ciencia y la Tecnología de la Universidad de Salamanca, relata que buscaba algo diferente. “Por mi trayectoria investigativa, me facilitaron mucho las cosas, competí con aspirantes de toda la región”, dijo.
Sin duda, la educación española es un destino para desarrollarse; no obstante, se necesita mirar con lupa algunas deficiencias a la hora de elegir.
La educación virtual es el método del futuro
Según cifras del Ministerio de Educación de Colombia, la demanda de educación online aumentó 500% entre 2012 y 2015, al pasar de 12.000 a 65.000 estudiantes. Así mismo, la cartera educativa declaró que la oferta de programas virtuales se multiplicó por cuatro en el mismo periodo, pasando de 122 a 487 en todos los niveles formativos. El mayor porcentaje de estudiantes está entre 25 y 35 años de edad que no pueden asistir de manera presencial.
Las opiniones
Alfredo Sarmiento
Analista de Educación
“Las universidades españolas ofrecen programas académicos más económicos que permiten mayor acceso a los jóvenes latinoamericanos”.
Enrique Forero
Pte. Asociación colombiana de Ciencias exactas
“A los estudiantes colombianos que no son bilingües les queda más fácil estudiar en España que en EE.UU., Alemania o Brasil”.