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La buena postura en la jornada puede ayudar a prevenir enfermedades musculares
Problemas como dolores de espalda, de cuello, en los hombros y demás cada vez son un padecimiento más común pues son provocados por el estrés laboral, las malas posturas y la falta de pausas activas.
Ahora bien, un elemento clave para prevenir tales cuadros en la salud es tener una buena silla de características ergonómicas, que además de ser cómoda se adapte a las necesidades de quien la usará a fin de asegurar que esta sea útil, además de que tenga las medidas, entendiendo que el ancho y la profundidad de la silla determinan la distancia necesaria a la mesa y por tanto al computador.
El experto en salud ocupacional de la Universidad del Rosario, Juan Alberto Castillo aseguró que una buena silla permite tener una buena circulación, evita la fatiga muscular y ayuda a tener una buena postura.
Ahora bien, para elegirlas, hay ciertas medida ergonómicas que dan la línea de partida para el proceso de selección, sin embargo, los puntos claves son: el espaldar, el material y los puntos de adaptación que tiene la silla, a más elementos flexibles, mejor es la silla.
Castillo resaltó, entre tanto, que el ancho del espaldar se debe ajustar a la persona; las curvas deben garantizar la posición de la columna por medio de un apoyo dorsal y uno lumbar, y además, se debe mover conforme la persona se mueva.
El experto agregó que también es importante que la silla obligue a la persona a levantarse de manera periódica para cambiar su posición, en la misma medida en que se deben hacer pausas activas.
Castillo concluyó que “como cada persona se sienta de manera distinta, la silla no debe ser como una plástica o una de ruedas que no le den la capacidad de moverse; en estas sillas es clave que se puedan mover y sean flexibles”.
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