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La relación diplomática entre Colombia y Argentina se encuentra en una situación delicada, con riesgo de deterioro y potencialmente al borde del colapso. Esto se ha intensificado tras los comentarios confrontativos del presidente argentino, Javier Milei, hacia su homólogo colombiano, Gustavo Petro, durante una entrevista en el canal CNN. Milei se refirió a Petro como un "asesino terrorista" debido a su pasado como militante del Movimiento 19 de abril (M-19). En respuesta, la cancillería colombiana anunció la expulsión de algunos miembros diplomáticos de la Embajada de Argentina en Colombia.
El panorama diplomático entre estos dos países está influenciado por el sesgo ideológico del presidente argentino. Milei, quien se autodenomina "liberal libertario", parece mostrar un claro rechazo hacia los gobiernos que se sitúan en el espectro político opuesto. Sin embargo, las relaciones consulares, al igual que las relaciones diplomáticas, deben basarse en el principio de Igualdad Soberana, establecido en el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas.
Es crucial analizar si existe también un riesgo económico que podría afectar la balanza comercial colombiana. Durante el último año, la economía colombiana ha sido caracterizada por sus sólidas relaciones comerciales con Estados Unidos, Panamá y China, representando alrededor del 26,44%, 9,37% y 4,98% de las exportaciones respectivamente.
Según se observa en la Figura 1, durante los años 2021 y 2023, tanto la economía panameña como la hindú, así como la estadounidense, han contribuido al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia mediante el aumento de las exportaciones en la balanza comercial. Sin embargo, la contribución de la economía argentina ha sido inferior al 1% durante el mismo periodo. Esto plantea una idea sobre el posible impacto que podría tener la terminación de las relaciones diplomáticas y económicas con Argentina.
La otra cara de la moneda se enfoca en la proporción de las importaciones que Colombia recibe de la economía argentina. En la Figura 2, se puede observar que los principales socios importadores de Colombia son Estados Unidos, China, Brasil, México y Alemania, los cuales representaron 25,6%, 21,6%, 6,3%, 5% y 3,8% respectivamente durante el último año. En contraste, las importaciones provenientes de la economía argentina representaron aproximadamente 2,2% del total, lo que sugiere que, en caso de un quiebre de las relaciones bilaterales, podría surgir problemas de abastecimiento en Colombia. Esto podría impactar las cadenas de suministro internas, especialmente en los precios de productos como cereales, embarcaciones y hortalizas, que son los principales bienes importados de Argentina.
En resumen, el conflicto diplomático entre estas dos naciones plantea interrogantes sobre el respeto a los principios del derecho internacional. La solicitud de retirada de miembros diplomáticos marca el inicio de un posible quiebre en la cooperación internacional. La persistente falta de respeto del presidente argentino hacia ideologías políticas diferentes a la suya amenaza la estabilidad diplomática bilateral y cuestiona la continuidad de la colaboración entre ambas naciones.
El presidente Petro no solo ejerce como jefe de Estado, sino que también representa al pueblo colombiano. Cualquier forma de comportamiento autoritario es inaceptable. La ultraderecha, con su tendencia a polarizar y propagar el odio y la demagogia, solo conduce a la ruina y la miseria en las naciones que lidera.
