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La conectividad para la transmisión de información a través del espectro radioeléctrico es vital no solo para el desarrollo económico del país, para el aumento de la productividad de las regiones, sino para la equidad social y el desarrollo de las personas, en especial aquellas que están en las regiones más apartadas y/o en situación de pobreza.
El espectro radioeléctrico es el medio por el cual se trasmiten las frecuencias de ondas electromagnéticas utilizadas para los servicios de celular móvil y como tal es vital para el desarrollo del ecosistema digital. Estas redes admiten una variedad de aplicaciones en línea, transformando la forma en que las personas acceden a los recursos de salud, transporte, educación, agricultura, empleo, gobierno y servicios financieros. La conectividad puede entonces hacer la diferencia entre estar aislado o tener “el mundo y la información a los pies”.
A pesar de que se cumplen casi 30 años de la llegada de la telefonía celular y el internet a Colombia, y pese a los avances históricos por reducir las brechas de conectividad digital, todavía más del 30 por ciento de los hogares no tienen acceso a internet y en las zonas rurales la carencia alcanza cotas del 70 por ciento.
Es por ello importante la visión con la que se aborde en los próximos meses la renovación y futuras asignaciones del espectro ante los vencimientos de los permisos existentes para los servicios de celular móvil de Claro, Movistar, Tigo, DirecTV, Avantel, así como del tránsito al nuevo régimen de habilitación general por parte de Tigo.
Toda vez que se debe promover la inversión para el despliegue de infraestructuras de redes troncales y de conectividad en la última milla, que faciliten la inclusión digital, debe existir un sano equilibrio entre el criterio fiscalista y la necesidad de mantener una posición competitiva y generar los incentivos adecuados de inversión para los operadores. Se requiere certidumbre a efectos de asegurar el mayor beneficio para los usuarios y la maximización del bienestar social en el acceso y uso del recurso radioeléctrico.
Tales objetivos están armonizados con el programa de gobierno del presidente Gustavo Petro que propone democratizar el espacio virtual y lograr una mayor y mejor cobertura en términos de conectividad en todo el territorio nacional, con prioridad de las zonas rurales, impulsando las redes comunitarias y a los pequeños prestadores del servicio de internet en los pueblos.
El trasfondo de la discusión es la sustentabilidad para el desarrollo de las telecomunicaciones. Una necesidad que se hace más palpable en la medida que los servicios de internet tienen tarifas a los usuarios decrecientes, potencia el desarrollo humano y económico, y que nos aprestamos a adoptar la tecnología 5G que nos permite velocidades de banda ancha móvil más altas y latencias más bajas para desarrollar el máximo potencial de Internet de las Cosas.