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Cuentan que Aretha Franklin durante un cumpleaños de Stevie Wonder, le dijo al cantarle el “happybirthday”, que “cada cumpleaños es un regalo. Cada día es un regalo”, una frase que muchos la roban para mandarla en un chat a una persona favorita cuando cumple años. Y es que existen diversas celebraciones y festividades durante los 365 días del año, pero hay una que divide sentimientos y pasiones: ¡el cumpleaños!
Algunos lo evitan, se esconden, se enferman, no van a estudiar, a la oficina o a la planta; otros lo anuncian con bombos y platillos, lo cantan por cielo, mar y tierra; muchas maneras de enfrentar, en definitiva, un día extraño, feliz, triste, melancólico, divertido del calendario. Todos tenemos ese mismo día dentro de los doce meses que celebra en esencia nuestra fecha de nacimiento, y mientras a unos les alegra el alma, a otros más los atormenta. Todo ese sentimiento cambia con el paso de los años.
¿Qué tipo de cumpleañero es usted? Les confieso que para mi cumplir años viene con un montón de sentimientos encontrados, es todo un dilema; me gusta celebrar con quienes amo, me alegran los detalles, los regalos, recibo con verdadero amor los mensajes de quienes me felicitan, tampoco me tomo personal si a alguien se le pasa la fecha, ya que más olvidadiza que yo, para estas fechas, no existe, sin embargo me abruma un poco la expectativa de quienes me rodean en cuanto al plan, a la celebración como tal. Todos esperan una mega fiesta llena de personas y yo prefiero celebrar con mi gente cercana.
Ahora hablemos de la presión que trae este día; quisiera entender por qué a mi y a muchas mujeres, aunque estoy segura que también le sucede a algunos hombres, nos estresa que nos pregunten la edad. Empecemos por resaltar que en mi caso, no se trata del número de años que cumplo, sino el momento de la vida por el que atravesamos, cuando ese día se acerca. Evalúo más las etapas, las realizaciones, los logros. Lo resumiría en algo así como: no son los años que cumples, es lo que has hecho durante ese tiempo, y por supuesto, qué tanto se parece tu realidad, el presente, a lo que imaginaste hace un tiempo que serían tu vida y tus circunstancias cuando ese llegara esa edad.
Como de costumbre, cuando estoy en la cabina de radio, en La FM de RCN, pensando en temas para la columna, hice una pequeña encuesta, y lo suponía, tenemos un buen surtido de cumpleañeros en la mesa. Darcy Quinn, quien dice que le gustaba hasta que pasó los 50 años, ya no le gusta tanto (jajaja); a Santi Angel no le gusta ser centro de atención ni en su cumpleaños; a Jesús Prado le gusta tanto cumplir años, que si por él fuera, celebraría y cumpliría tres veces al año; a William Calderón también le fascina, además le gusta calcular qué tan viejo está y piensa en su papá en esas fechas. Busca fotos y se compara con él para ver cómo estaría su papá en esa misma edad. Todo un ñoño de los cumpleaños.
Lo importante es que es inevitable envejecer y que cada 24 horas se cumple un día de vida. Yo me quedo con otra frase célebre sobre los cumpleaños, esta vez de Coco Chanel: “puedes ser preciosa a los 30, encantadora a los 40 e irresistible el resto de tu vida”, es cuestión de no atormentarse con el paso de años sino llevarlos con mucha personalidad.