La contrarreforma laboral

En la Precandidatura Presidencial pude construir con trabajadores, sindicatos, empresarios y técnicos, un Proyecto de Ley de Reforma Laboral, que a propósito de lo presentado por la ministra de trabajo y la propuesta hecha por el presidente Álvaro Uribe, recogida, por el presidente Gustavo Petro, sobre el Plan Quinquenal de salarios y productividad, vendría bien analizar esta propuesta que hicimos.

Lo primero es reconocer que hoy llegamos a 57,9 % de informalidad, según el Dane, lo que significa que de los casi 21 millones de ciudadanos que están en etapa laboral, tan solo hoy tenemos de 8 a 9 millones trabajadores gozando de las prebendas de la formalidad y más de 12 millones de colombianos, sin seguridad social, prestaciones sociales, futura pensión y todo lo que implica los beneficios de la formalidad en materia laboral.

Nuestras propuestas son sencillas, lo primero es reconocer la realidad laboral de nuestro país, como la que se vive en Cartagena con juan, un mesero de un hotel que en la mañana se gana cerca de $60.000 del desayuno, al medio día factura otros $80.000 en un restaurante al almuerzo y en la noche en un bar usualmente gana cerca de $120.000, para un total de $260.000, pero en la realidad, pese a que gana al mes un buen ingreso monetario hace parte de los trabajadores informales porque el sistema no les permite entrar fácilmente. Igualmente pasa con nuestros jóvenes que trabajan en plataformas o empresas en Suiza, donde se ganan cerca de US$4.000 pero este sistema no les permite acceder a ser trabajadores formales en Colombia. Injusticia!.

Por eso se debe pensar en un salario mínimo diferencial mas alto, por días, por horas y turnos, que responda a las realidades, que sea regional y que ante todo permita que los ciudadanos no pierdan sus beneficios sociales como el Sisbén y familias en acción; un sistema donde puedan ahorrar individualmente para subir su pensión, esto es, que con cada peso que ahorren en los fondos pensiónales el estado les de la misma proporción, pero que también puedan cooperar con un Sisbén plus o plan complementario de servicio de salud.

De esta manera y a través de este nuevo sistema de empleabilidad, se generen más y mejores oportunidades laborales con un enfoque claro de formalización, empleo digno, donde se reconozca las diferentes formas de trabajo, las economías locales, la formalidad como punto de acuerdo entre toda la sociedad. Si bien es cierto hay que mirar como dijo el presidente Petro toda la reforma en su conjunto, estos aspectos para trabajar contra la informalidad no se deben descartar.

La fórmula de una buena reforma laboral es un verdadero diálogo tripartito, trabajadores, estado y empresarios, donde todos deben ganar y luchar contra el verdadero flagelo. La informalidad.