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A comienzos de agosto asistí a la presentación del plan “Antioquia 2040”, el cual es un plan estratégico que “tiene como objetivo proyectar la Antioquia que soñamos y trazar una ruta de trabajo como sociedad Antioqueña para alcanzarla”. Antioquia 2040 está inspirado en cumplir con los diecisiete objetivos de desarrollo sostenible promulgados por las Naciones Unidas en 2015. Antioquia 2040 se estructura en torno a seis pilares: equidad, educación, competitividad, sostenibilidad, multiculturalidad, y paz, y, a su vez, estos pilares se fundamentan en 25 movilizadores que impulsan acciones concretas.
De estos movilizadores, destaco especialmente, la “Infraestructura para la equidad y competitividad”, que aborda la conectividad física y digital, constituyéndose en el habilitador esencial para el cierre de las brechas sociales entre las regiones y las capitales:
Profundizar la conectividad física multimodal (férreo, marítimos, aéreo, y doble calzada) de la región va a acelerar la movilidad de personas y mercancías, para facilitar el comercio, la inversión, el turismo a las regiones, y la integración regional.
En palabras del Gobernador Gaviria “un túnel trae una doble calzada, y una doble calzada trae otro túnel y así sucesivamente hasta integrar el territorio”, y precisamente la red de túneles y carreteras de doble calzada desarrollados en los últimos años y los que vienen en ejecución, integrarán social y económicamente la “médula” del departamento, en un trayecto carreteable de menos de cuatro horas y a lo largo de 250 km, la zona donde se concentra más de 82% de la población, con cuatro grandes nodos: Urabá, Santa Fe de Antioquia, Valle del Aburrá y Valle de Oriente, creando una infraestructura logística de clase mundial, para integrar el potencial agroindustrial de la región con el mundo.
Adicionalmente, el Gobernador Gaviria mencionó la importancia de lograr a futuro la integración entre el suroeste del departamento y el océano Pacífico, y este “sueño” se puede constituir en el integrador del Chocó con el resto del país, pagando la deuda social que tiene el país con el Chocó.
Por otro lado, la conectividad digital actúa como un catalizador del conocimiento, la innovación y la inclusión social. En un mundo cada vez más globalizado, el acceso a la información, la posibilidad de comunicarse instantáneamente y la digitalización de servicios, desde la educación hasta la banca, no solo amplían las oportunidades económicas, sino que también democratizan el acceso a recursos y oportunidades.
El desarrollo sostenible, la competitividad regional, y el cierre de brechas sociales entre las regiones depende de muchos factores, pero sin lugar a dudas la conectividad física y digital deben ser el eje medular de la implementación de Antioquia 2040.
Más allá del desafío económico que representa “Antioquia 2040”, es fundamental que se constituya en una visión de sociedad que trascienda a los vaivenes y egos políticos.
PD: hablando de egos políticos, en 18 años llevamos cuatro versiones de la Marca País, ¿no es un absurdo y un despilfarro que con el cambio de cada gobierno se relance la marca país? El reconocimiento de una marca requiere permanencia en el tiempo y consistencia en la ejecución.
