La teoría del caos

El nexo entre las variables más alejadas no parece una cuestión de azar. Así sucede en las cadenas de suministro y logística de las empresas de comercio exterior del país, las cuales deben ser lo más competitivas posible, con el fin de ganarle la carrera a otros proveedores nacionales e internacionales.

Según la más reciente Encuesta Nacionales de Logística, realizada por el Departamento Nacional de Planeación (DNP), a nivel nacional, el promedio del costo logístico sobre las ventas se ubicó en 17,9%, debido a los rubros de transporte (35,9%), inventarios (25,5%), almacenamiento (25,1%), costos administrativos (10,2%) y demás costos (3,3%).

Este costo logístico, calculado como la razón entre el costo de las actividades logísticas de una empresa sobre el total de sus ventas durante un año, se ubicó por encima de 12,9%, dato registrado en la encuesta anterior y que es particularmente superior a la meta propuesta de 9,5%, que debería ponernos en el promedio de nuestros competidores.

Por su parte, este indicador por tamaño de empresa mostró importantes brechas entre las empresas grandes y las pequeñas y micro, que presentaron costos logísticos por encima de la media nacional.
En términos generales, los empresarios detectaron que las problemáticas que más afectan los servicios logísticos son el deterioro de vías, los cierres por intervención en la vía y los cierres de orden público.
Algunos de estos puntos serán abordados en el Congreso Internacional de Supply Chain y Logística de Analdex, en Cartagena, el 9 y 10 de mayo, con el fin de dar mayor conocimiento, experiencia y compartir mejores prácticas, para aumentar el desempeño de las cadenas de suministro de las empresas colombianas.

Esto al abordar temáticas como estrategias para afrontar demandas volátiles, gestión de incertidumbre y pronósticos probabilísticos, Inteligencia Artificial, el Machine Learning, nuevos riesgos en el transporte de mercancías, entre otras.

Igualmente, vemos que la innovación logística, la gestión pública territorial y el orden público, la conectividad y la relación estrecha con las tecnologías 4.0 en logística, son desafíos tangibles que aún enfrenta el territorio en su proceso por integrarse con las Cadenas Globales de Valor.

Mientras que en Colombia seguimos midiendo los tiempos de nacionalización de mercancías en días, nuestros socios comerciales lo hacen en horas, lo que nos resta competitividad. Así lo evidencia el último estudio de tiempos de despacho de 2023, publicado por la Dian, donde son 140 horas en promedio para despachar las mercancías desde el puerto, en el caso de las exportaciones.

Desde 2016 los usuarios de comercio exterior esperan la aclamada modernización aduanera, pero no ha llegado. Las noticias más recientes indicarían que estaría previsto para el 2028 y en el entretanto los trámites serán lentos y costosos para los importadores y exportadores.

Todo esto redunda en una caída en el Índice de Desempeño Logístico de 2023, del Banco Mundial. Es así como Colombia ocupó el puesto 66 (entre 139 países), perdiendo ocho lugares frente a la edición de 2018, cuando alcanzó el puesto 58 entre 160 economías. En cuanto a la puntuación general del indicador, el país registró 2,9 puntos sobre 5,0 posibles, estando levemente por encima del promedio de la región (2,8 puntos). Cabe señalar que, en el reporte de 2018, Colombia puntuó con 2,94.

A pesar de este retroceso, el país ha evidenciado mejoras importantes en su desempeño logístico en la última década, pues en el reporte de 2014 se ubicó en el puesto 97 de 160 países, correspondiente a una puntuación de 2,64 sobre 5,0, explicado por los rezagos en todos los componentes, principalmente en puntualidad (puesto 108/160) y seguimiento y localización (puesto 111/160).

El sector privado debe seguir promoviendo estrategias de colaboración, que lleven a que se apliquen mejores prácticas y se reduzcan tiempos en lo que respecta a la operación de las empresas, dado que la modernización aduanera y otros temas estructurales como infraestructura y transporte, pueden seguir siendo un problema en los próximos años en donde hay poco margen de maniobra de los privados.

Adicional a esto, debe haber una conversación profunda orientada a la transformación digital, que no es solamente un tema público, ya que las empresas también deben trabajar para dar el salto tecnológico para desarrollar procesos más eficientes

No debemos perder el optimismo de ver una mejor logística con menos caos y más armonía, la cual nos guíe hacia una mejor competitividad internacional. Cuenten con Analdex para que el trabajo público privado sea aún más estrecho, en pro de todos los actores del comercio exterior del país.