.
Analistas 04/08/2023

Dofa financiero

Javier Tovar Márquez
Profesor Inalde Business School

Existe una metodología de adopción universal que es fundamental en el análisis estratégico: la matriz de debilidades, oportunidad, fortalezas y amenazas o D0fa, como se conoce en el mundo de los negocios. Fue creado en los años 60 por Albert Humphrey y representó un salto de calidad en los modelos teóricos de gestión que existían, ya que planteaba un análisis simple y concreto para entender mejor a las empresas. El proceso evolucionó hasta convertirse en análisis de tipo Dofa cruzados, en los que al analizar las oportunidades y fortalezas de forma combinada se pueden crear estrategias ofensivas o de reorientación cuando se analizan en conjunto las debilidades y oportunidades.

Aunque sus virtudes son innegables, su uso se ha limitado en exceso a analizar situaciones de negocios con una óptica generalista, tanto, que ha llegado a convertirse en un cliché dentro de las reuniones de planeación para convertirse en una zona común dentro de nuestros planes de negocios.

Hace un tiempo hice parte de un ejercicio de planeación estratégica de dos días en una gran empresa. Este fue un evento costoso y aunque sobra decir que el equipo directivo tenía las mejores intenciones, no fue suficiente. Una vez regresamos a nuestra realidad, seguimos con los problemas habituales, perdiendo mercado y con resultados financieros negativos. Lo que falló en este ejercicio es que dedicamos una tercera parte del tiempo a construir la matriz Dofa de la compañía en una cartelera, un ejercicio que creó reflexión y motivación, pero que lastimosamente quedó en el olvido y con muy pocos planes de acción y de comunicación.

El Dofa puede ser una herramienta muy importante para lograr una mejor ejecución de nuestra estrategia si se trabaja con detalle y con buenas preguntas a su alrededor. En este punto, las finanzas cumplen un papel destacado para alcanzar mejores resultados. ¿Qué tal si retamos a nuestras empresas en la construcción y seguimiento continuo de una matriz Dofa financiera? El ejercicio tiene dos bondades: acercar los resultados cuantitativos a las decisiones estratégicas, lo cual tiene como punto a favor demostrar que detrás de todo resultado existe un modelo de negocios que lo soporta. Por otro lado, ayuda a aterrizar muchas discusiones estratégicas que, por no tener un objetivo medible, se pueden volver paisaje. Los indicadores contrario a lo que se piensa, pueden generar mucha flexibilidad en el proceso de toma de decisiones.

No es lo mismo hablar de debilidades alrededor de nuestros modelos de negocios que hablar de debilidades puntuales que se reflejan, por ejemplo, en excesos de cuentas por cobrar tangibles en número de días. Por otro lado, las fortalezas o amenazas también pueden ser evidentes en el margen bruto, operacional o, incluso, ser vistas a través de nuestra tasa efectiva de tributación (como en el caso de las zonas francas). Desde lo positivo, imaginemos por un segundo lo enriquecedor que puede ser el poner a discutir nuestro flujo de caja operativo en términos de nuestras Dofa.

Cuando alineamos las Dofa con nuestros objetivos financieros, “la música y la letra están en sintonía”. No en vano, las teorías clásicas del management tienen mucho en común con los Beatles o Queen. Por más que lleguen nuevos estilos, dinámicas o modas ante las decisiones críticas, siempre volveremos a los fundamentales.

Conozca los beneficios exclusivos para
nuestros suscriptores

ACCEDA YA SUSCRÍBASE YA