Tan diversa como Colombia

La semana anterior se realizó en la ciudad de Cartagena la quincuagésima séptima edición de la Convención Bancaria con un récord histórico de asistencia, lo que continuó posicionándola como uno de los eventos económicos y empresariales más importantes del país.

Este espacio fue propicio para conmemorar los 100 años de la Misión Kemmerer a partir de la cual se establecieron los cimientos de nuestro sistema financiero y la institucionalidad que nos ha permitido preservar la estabilidad macroeconómica en las últimas décadas.

Asimismo, expertos nacionales e internacionales, altos representantes del gobierno y distintas autoridades del sector bancario, entablaron discusiones respecto a los retos en materia de crecimiento económico, el papel de la banca en la transformación social, económica y energética, así como la importancia de impulsar el desarrollo sostenible en las regiones del país con gran potencial, pero que aún presentan una elevada incidencia de la pobreza.

Respecto a los desafíos que enfrenta la economía colombiana se destacó la necesidad de adaptarse con mayor celeridad a los cambios generados por los actuales procesos de disrupción tecnológica, pues como bien señaló el economista Xavier Sala i Martín, será el desarrollo tecnológico lo que determine las mejoras en productividad y el crecimiento económico de largo plazo.

Adicionalmente, el reconocido economista Ricardo Hausmann destacó la importancia de impulsar las energías renovables, realizar una protección medioambiental efectiva que permita desarrollar los mercados de carbono e insertar nuestros bienes y servicios en las cadenas globales de valor, objetivo en el que coincidieron los representantes del Gobierno, los analistas y académicos.

Se hicieron, en este contexto, salvedades relativas a que el impulso a estas nuevas fuentes de crecimiento debe ser complementario, y no excluyente, a aquellas que han sustentado el desarrollo del país, como, por ejemplo, las asociadas al sector minero energético.

La Convención Bancaria brindó un espacio para escuchar valiosos análisis de gobernadores y congresistas de todas las orillas políticas, que, pese a las diferencias, destacaron la importancia de la institucionalidad, la consolidación de la democracia, el desarrollo productivo en los territorios y la búsqueda de consensos frente a las reformas estructurales que el Gobierno se encuentra liderando.

Desde el sector financiero coincidimos con estas visiones, así como con los lineamientos del Gobierno para fomentar el crecimiento económico, especialmente aquellos relacionados con el otorgamiento de crédito para la economía popular, el sector agropecuario, los proyectos sostenibles en medio ambiente, entre otros.

Avanzar en este frente requerirá de esfuerzos adicionales del Gobierno para aumentar la provisión de infraestructura multimodal y la cobertura de internet, esto último con el fin de masificar la banca digital con la cual mejoren los niveles de profundización e inclusión.

Las palabras del superintendente Financiero, César Ferrari, referentes a que no hay un desarrollo sólido sin crecimiento del sistema financiero, así como sus preocupaciones por los bajos niveles de ahorro, coinciden con los diagnósticos de la banca y el compromiso de esta para trabajar con conjunto con las autoridades.

La Convención Bancaria propició, como es habitual, conversaciones y espacios de encuentro en donde se pudiera discutir de manera abierta sobre los retos que enfrentamos y la manera de hacerles frente. Solo a partir de debates informados y respetuosos de la diversidad como los que se dieron en este evento es que podremos alcanzar consensos y construir un mejor futuro para todos.