MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
La palabra soberanía se vincula a la palabra poder y esta última es igual a política. La palabra proviene de la voz latina “super omnia” y su efecto es “poder supremo”.
El vocablo soberanía es una palabra viajera en el tiempo y el espacio. En el espacio refleja el dominio y el poder de uno sobre el otro, y en el tiempo, es recurrida para la conformación de las naciones, de los Estados, de bloques políticos y económicos a lo largo de la historia.
Todas las tecnologías a lo largo de la historia, incluidas las digitales, nacen con la palabra “geopolítica”. Pero hay una diferencia de las tecnologías digitales con las analógicas. La primera gran ola masificadora de miles de tecnologías digitales, incluida la inteligencia artificial (IA), es la derivada de la infraestructura digital. La tecnología digital es sinónimo de poder político global, de poder económico y desconfianza recíproca.
¿Por qué nace la soberanía en general? Nace como una respuesta a un temor, un miedo que provoca la ausencia de algo. Quién carece de tecnología digital, tiene miedo. Por eso se declara potestativamente, como discurso heroico y con ello, una serie de acciones para defendernos, diseñarla, tenerla y apropiarla. La soberanía digital no se declara, se construye.
¿Cuál es el reto? La geografía y lo transfronterizo. Esto es un juego de poder por bloques y dimensión de mercado. Estados Unidos y China apuestan a su capacidad de mercado interno e innovación, de ahí en adelante ningún país puede hacer nada solo. Nace la coordinación geopolítica o de bloque.
Soberanía digital vs. seguridad nacional. Europa se defiende a partir de proteger valores democráticos y de derechos humanos europeos, algo que llaman humanismo digital. Busca su propia infraestructura digital, ciberseguridad, formación de capacidades digitales e innovación. invirtió $250.000 millones de euros en digitalización; quiere 80% de la población con competencias digitales e invertirá $30.000 millones más, para financiar su Ley de chips.
Ha desarrollado una sobre-regulación en competencia económica, protección de datos, mercados y servicios digitales, derechos digitales, protección al consumidor, propiedad intelectual e Inteligencia Artificial, y necesita aliados en el mundo.
EUA actúa a partir de la protección de sus mercados, integridad territorial y sus sistemas de defensa Elon Musk, Vivek Ramaswamy y ahora David Saks, lideran la IA y la política digital desde la Casa Blanca. China quiere vender, no promueve filosofía alguna, es un capitalismo de Estado transparente.
Conclusión: no hay soberanía sin agenda digital, ni infraestructura digital y 5G. Es vital la capacidad de los países gestionar sus propias infraestructuras y servicios sin depender de la geopolítica.
Reguladores y ministros de América Latina se reunieron para hablar de la autonomía digital. (soberanía digital). ¿Conclusiones?: evitar la dependencia de actores con intereses geopolíticos; generar capacidades digitales, promover mercados digitales robustos, control local de plataformas de datos nacionales; protección de la privacidad y la seguridad de los ciudadanos, empresas y Estado; despliegue de infraestructura digital 5G con ciberseguridad y neutralidad tecnológica como pilar de la autonomía digital.
América Latina tiene una realidad económica, política y jurídica distinta a los bloques geopolíticos y deben encontrar su lenguaje, acciones y actuar unidos.