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Modernizar el Código Electoral en Colombia es una tarea que lleva años pendiente en el país, un cambio que se hace impostergable y que reclama el nuevo contexto mundial en el que nos encontramos. Al iniciarse su debate esta semana en el Congreso de República se comienza a configurar la actualización del sistema, bajo la consigna de entregarle a los colombianos un nuevo código que brinde mayores garantías al ejercicio democrático en Colombia.
Luego de semanas de estudio y de la revisión de más de 500 proposiciones, las Comisiones Primeras conjuntas de Senado y Cámara aprobaron este martes, la proposición con la que termina el informe de ponencia del Proyecto de Ley Estatutaria No. 234 de 2020 (Senado) y No. 409 de 2020 (Cámara) “Por la cual se expide el Código Electoral Colombiano y se dictan otras disposiciones”, de manera que se continúa con la revisión de artículos que tienen observaciones por parte de los congresistas, para avanzar correctamente en el recorrido de tramites y debates que deberá surtir esta reforma.
Este proyecto de modernización del Código Electoral presentado por el Gobierno Nacional, el Consejo Nacional Electoral y la Registraduría Nacional, propone entre los cambios más destacados: ampliar la modalidad del voto, manteniendo el voto presencial e incluyendo el voto mixto, digital remoto y anticipado; así como también, la eliminación de periodos de inscripción de cédulas de ciudadanía; el aumento de la participación de las mujeres en las listas de los partidos, que pasaría del 30% al 40%; la ampliación de una hora más de la jornada electoral; la implementación de transporte gratuito en las jornadas electorales; la utilización de una cédula electrónica para reducir el riesgo de suplantación; la creación del registro electoral para evitar el fraude; la trashumancia y otras actualizaciones en su mayoría muy técnicas, que responden a las necesidades del país.
Si tenemos en cuenta que el código actual data de 1986 y que todavía existen varias modificaciones constitucionales que no se han incorporado al sistema; como el voto electrónico, que según la Ley 892 de 2004 debía estar implementado desde antes del 2009, por mencionar un ejemplo, es acertado buscar la unificación de la legislación electoral para que podamos contar con un régimen moderno y confiable.
Aunque son mayoritarias las voces que se escuchan a favor de las distintas propuestas planteadas en este proyecto, estamos asegurándonos que se realice un debate profundo, en el que se escuchen las distintas posiciones y se logren consensos para poder así, construir una verdadera reforma integral del sistema, que brinde mayor transparencia en los comicios electorales y esté acorde a las actualizaciones tecnológicas.
Como Presidente de la Comisión de Vigilancia al Organismo Electoral del Senado de la República, que entre otras cosas, es la encargada de vigilar el cumplimiento de las disposiciones constitucionales y legales sobre el Organismo Electoral Colombiano, estaré atento que el Congreso realice un debate juicioso y profundo de este Proyecto de Ley Estatutaria que le urge al país.
La nueva realidad que nos llegó de golpe, nos ha exigido bastantes cambios, entre ellos colocarle el acelerador a procesos digitales que desde hace mucho debieron haberse implementado. Estamos trabajando por lograr una adecuada reforma al código electoral, que además de estar ajustada a la nueva realidad que estamos viviendo y sus exigencias tecnológicas, garantice y revitalice la democracia del país.