Elon Musk

Arthur Dent es rescatado por una nave espacial segundos antes de que la Tierra sea destruida por una civilización alienígena que está construyendo una autopista hiperespacial. El extraterrestre que lo salva se convierte en su compañero de viaje a través de la galaxia, gobernada por un presidente de dos cabezas. Quienes la habitan, intentan hallar la «Respuesta a La Gran Pregunta de la Vida, el Universo y Todo lo Demás».

Construyen una supercomputadora que tarda siete millones de años en dar con la respuesta: 42. El desconcierto genera reclamos por algo tan aparentemente absurdo, a los que la maquina responde: «Definitivamente esa es la respuesta. Creo que el problema, para ser sincero con ustedes, es que en realidad nunca han sabido cuál es la pregunta».

Publicado en 1979, “Guía del autopista galáctico” es un libro de ciencia ficción de Douglas Adams y el más influyente en la filosofía de vida de un joven Elon Musk quien entraba en su adolescencia. Libros, videojuegos, juegos de rol y de estrategia, sumados a la ambivalente -a veces más que cruel y oscura personalidad de su padre- configuraron la personalidad de quien a los 13 años creo 3 videojuegos, a los 27 -con la venta de su primer gran emprendimiento digital y durmiendo bajo el escritorio en medio de carencias- ganó sus primeros US$ 22 millones y a los 40 se convirtió en el hombre más rico del planeta.

«Voy a colonizar Marte. Mi misión en la vida es convertir a la humanidad en una civilización multiplanetaria” argumentó en 2001 cuando la empresa aeroespacial SpaceX nacía en su mente.

Una idea en la que puso todo el peso de su personalidad que “no tiende a colaborar con los demás de forma espontánea ni en lo personal ni en lo profesional” y ha demostrado que puede inspirar, aterrorizar y a veces intimidar a quien lo rodea. “No le gusta compartir el poder” confiesa Gwynne Shotwell quien lleva más de 20 años trabajando con él y la que más tiempo a podido conciliar con su síndrome de Asperger.

Musk guarda una fascinación por la idea de que podríamos ser simples peones en una simulación concebida por algunos seres de un orden superior. Adams escribe en su libro “Hay una teoría que sostiene que si alguien descubre alguna vez para qué existe exactamente el universo y por qué está aquí, este desaparecerá instantáneamente y será reemplazado por algo más extraño e inexplicable todavía”.

Quizá Elon Musk pretenda ser quien lo descubra, pero esta es tan solo un pequeña parte de la vida de quien se propuso cambiar nuestro destino y aquí está toda su biografía escrita por Walter Isaacson.