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El Congreso de la República cerró marzo con la tercera edición de la Plenaria Sesión Mujer o Día M, una jornada dedicada exclusivamente para debatir y avanzar en proyectos de Ley que tienen un impacto positivo en la vida de las mujeres.
Fue el 28 de abril de 2021 cuando se firmó la Resolución 119 que establece el último miércoles para institucionalizar la realización de esa sesión especial en conmemoración del día de la mujer. Y si bien, todos los días tenemos mujeres berracas y transformadoras en el Congreso y en toda Colombia, que buscan impactar positivamente en la vida de muchas personas y reducir la desigualdad de género, es importante también generar espacios que nos permitan reflexionar sobre la situación de las mujeres en el país.
Para ello, la Comisión Legal para la Equidad de la Mujer seleccionó una serie de proyectos para discutir y desde la Mesa Directiva de la Cámara los acogimos con mucha ilusión, y se preguntaran: ¿Por qué un Día M? porque las mujeres representamos, de acuerdo con el Banco Mundial, 49,5% de la población en el mundo y en el país somos 51,2%; esto quiere decir que al menos la mitad de la población está compuesta por mujeres.
No obstante, aún estamos muy lejos de alcanzar la paridad de género que anhelamos, tanto en cargos directivos como de participación política. En términos de participación política, según el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe solo 34,9% de los gabinetes que dirigen ministerios están ocupados por mujeres, en Colombia, a pesar de tener 9 ministras y lograr 50% en la cabeza del sector, en general en el país, sólo 18,6% del total de cargos de dirección son ocupados por mujeres.
Adicionalmente, por un lado, nos encontramos con cifras de violencia que siguen aumentando de forma alarmante. En América Latina durante 2022 al menos 4.912 mujeres fueron víctimas de feminicidio, es decir que en promedio, a diario 13 mujeres fueron asesinadas. En Colombia, durante 2021, fueron asesinadas de manera violenta 622 personas, por su condición de ser mujer; en 2022 fueron 612 a quienes les quitaron la vida y en lo que va corrido del año 2023 tenemos 25 casos registrados por los observatorios de igualdad de género.
Por otro lado, en el país, los casos de violencia intrafamiliar no cesan. Entre 2021 y 2022 las cifras aumentaron de 22.119 a 32.425. La violencia sexual, tampoco da tregua y según el boletín más reciente de Sisma Mujer hubo un aumento de 21,11% respecto a los últimos dos años.
Ahora, si hablamos del trabajo no remunerado, datos del Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe, revelan que las mujeres dedicamos en promedio 34,75 horas a la semana a esa labor, mientras que los hombres hacen menos de la mitad, con un promedio de 14,18 horas. En Colombia, la diferencia se mantiene, ya que las mujeres hacemos 34,10 horas de trabajo no remunerado a la semana en promedio, mientras que los hombres 12,4; y si a ello le sumamos el trabajo remunerado: las mujeres hacemos 16,5 horas a la semana, y los hombres hacen 39,5, la brecha aún es grande.
Las mujeres hemos logrando grandes conquistas en busca de la equidad e igualdad de género; sin embargo, el camino que aún nos queda por recorrer es largo y difícil. Aunque para el siguiente Día M queda casi un año, mi compromiso de trabajar por las mujeres está presente todos los días ¡Aquí estamos y seguiremos avanzando con pasos firmes!