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Tal vez les haya ocurrido que conocen a alguien y no saben por qué razón les cae mal. Algunos estudios señalan que hay una probabilidad de que esta persona les recuerde a alguien más de su pasado. Pero hay otras teorías que señalan que es la falta de carisma lo que hace que una persona no pueda conectar con otros o no. De acuerdo con Ronald Riggio el carisma es una característica especial que permite a algunas personas generar un vínculo emocional profundo con los demás e inspirarlos. Aquellos que lo poseen suelen destacar por su capacidad de atraer, influir y motivar, además de ser comunicadores excepcionales. Aunque ha sido ampliamente estudiado en disciplinas como la sociología, la psicología, la ciencia política y la comunicación, sigue siendo un concepto difícil de precisar.
El carisma no es un rasgo innato asociado a un solo tipo de personalidad, sino una habilidad que se puede desarrollar con práctica y conciencia. En las últimas semanas he analizado algunos diferentes tipos de carisma y cómo cada uno puede influir en la percepción de los demás. A continuación, se exploran algunos de estos tipos de carisma y cómo pueden ser potenciados en la vida personal y profesional.
Primero, Carisma de Alta Convicción. Este tipo se encuentra asociado con la alta influencia que se tiene en los demás considerando la seguridad y firmeza con la que una persona expresa sus ideas. Quienes lo poseen transmiten pasión y certeza en lo que dicen, lo que literalmente influencia a las personas. Un claro ejemplo de esta clase de carisma es el psicólogo Dr. Jordan Peterson, por su claridad y confianza en sus argumentos, es un ejemplo de carisma de alta convicción.
Segundo, Carisma desde la autenticidad. Las personas con este carisma se muestran genuinas y sin pretensiones, lo que genera confianza y conexión rápida. Una característica importante es que no les importa compartir su vulnerabilidad y ser conocidos como seres humanos. Un ejemplo es Keanu Reeves quien es reconocido por su carisma auténtico debido a su humildad y transparencia.
Tercero, Carisma Empático. Este carisma se basa en la comprensión y sensibilidad hacia los sentimientos de los demás. Genera conexiones profundas y confianza. Aquí dos ejemplos interesantes. La princesa Diana es un claro ejemplo de carisma empático, logrando una profunda conexión con el público. Oprah Winfrey quien en sus entrevistas logra conectar con las personas desde lo más profundo de su ser.
Cuarto, Carisma Energético. Este carisma se basa en la vitalidad y entusiasmo que una persona proyecta, logrando inspirar y motivar a los demás. Es el tipo de persona del que muchos quieren estar cerca porque los recarga. Un ejemplo es Will Smith, un exponente del carisma energético, capaz de contagiar su pasión en cualquier interacción.
Quinto, Carisma de Autoridad. Este carisma proviene del conocimiento y la competencia en un área específica. Las personas con carisma de autoridad generan respeto y confianza debido a su experiencia y habilidades. Elon Musk, con su profundo conocimiento en tecnología y energías renovables, proyecta carisma de autoridad que lo convierte en una figura influyente. En el caso de él podría estar conectado con el primero carisma de alta convicción.
Todas las personas pueden tener varios tipos de carisma de acuerdo al contexto y personalidad. Lo importante es analizar cuál es el que se quiere desarrollar, si se tiene como objetivo poder conectar con las personas y ser influyente.
