¡La energía renovable del petróleo!

Los que hemos tenido la fortuna de visitar museos de automóviles de las marcas más importantes del mundo, hemos visto en sus exhibiciones cómo la humanidad pasó en menos de 10 años de movilizarse en carrozas de madera impulsadas por caballos (no de fuerza) de los de verdad, a automóviles de combustión, esto entre 1896 y 1906. A partir de ese momento, la industria de autos, aviones, motos se desarrolló con base en el petróleo como fuente de energía.

Asumiendo la hipótesis de que los dirigentes de la época hubieran advertido de los efectos nocivos del uso de motores de combustión fósil para el planeta y las galaxias interestelares (como dicen algunos) y hubiesen prohibido la fabricación de este tipo de motores, pues habría que pensar cómo sería el mundo hoy.

Y para seguir imaginando escenarios hipotéticos, no habría cambio climático, pero no existirían carros, ni aviones, menos motos, seguiríamos en carrozas de caballos, los trenes seguirían siendo de carbón y creo que mi papá no hubiera conocido a mi mamá (de Pereira a Quimbaya eso está muy lejos para ir a caballo), con sus consecuencias.

No hay ningún tipo de movilidad limpia hoy día que hubiese podido ser el reemplazo de la combustión fósil y que le hubiera permitido a la humanidad ser lo que es hoy, estaríamos absolutamente rezagados en medicina, tecnología, innovación, etc., sin un medio de movilidad eficiente.

Y aunque se ha intentado (hasta ahora sin éxito) un reemplazo para la combustión, la cosa no está fácil; la movilidad eléctrica, como vamos, seguirá siendo muy cara por el elevado costo de las baterías y muy pocos podrán acceder a ella; los fabricantes de vehículos están “con la lengua afuera” con el tamaño de las inversiones que han tenido que hacer en el desarrollo de los carros eléctricos y ya muchos están diciendo que ese no es el camino o que se necesitan muchos más años. Desde que Volta se inventó la batería en el año 1800 hasta hoy no hay mayores avances; generar energía limpia es factible (solar, eólica, hídrica), acumularla es lo difícil y recargarla aún más.

En resumen, tendremos que tener una noticia tecnológica muy grande para que realmente llegue un reemplazo económico y eficiente de la combustión.

Mientras tanto, se seguirá necesitando petróleo y combustión fósil para movilizarnos; no es culpa de los ciudadanos de a pie que no tengamos todavía un reemplazo para esto, o que al reemplazo NO pueda acceder la mayor parte de la población (ahí sí, irónicamente, solo para ricos).

En vez de acabar el petróleo, el país y su empresa insignia necesitan explorar, producir más, hacerlo más económico para la población, que haya más ingresos, que exportemos más y que antes de salvar a la humanidad, nos echen una manito a los colombianos con combustibles baratos, crecimiento económico, inversión social y desarrollo; para esto todavía necesitamos del petróleo.

Absolutamente de acuerdo en la importancia de luchar contra el cambio climático, pero con un título de Nobel del Medio Ambiente no pagamos las facturas; como el de la Paz, que tampoco tenemos paz.