.
ANALISTAS 24/09/2024

Olvídense de los cafetales... ¡Mamola!

En estos días consultando las redes sociales, me encontré con un artículo de un analista que, palabras más, palabras menos sugería que la caficultura y la actividad cafetera era un elemento que contribuía a incrementar la presencia de CO2 en el medio ambiente y lo mejor era que nos “olvidáramos del café”. Traía el analista a colación una serie de cálculos que yo respeto, pero no comparto. Es claro que el cambio climático y sus catastróficas consecuencias, especialmente para el sector agrícola, y más particularmente en las zonas ecuatoriales, tienen que ser un motivo de preocupación y continuo estudio, pero endilgarles a todos los sectores del agro un pedazo de culpa en la emisión de gases de efecto invernadero, tiene que mirarse y analizarse con un poco de más cuidado.

Muchas veces las personas que se ocupan de estos temas hablan de la agricultura como un todo. Olvidan los estudiosos que buena parte de los bienes que produce el campo tienen su origen en árboles. Efectivamente, así como suena, el cacao se produce en un árbol igualmente que el aguacate, las los cítricos, el aceite de palma, el caucho, el café entre muchos otros. Esta condición hace entonces que estén en continua captura de CO2 y emisión de oxígeno al aire.

Creo que pocos sectores del campo han hecho un trabajo tan riguroso en su medición de emisiones y captura de CO2 como el cafetero. En el 2017 la Federación Nacional de Cafeteros publicó la Acción de Mitigación Nacionalmente Apropiada (Nama) de la mano del Minagricultura, Minambiente y el Pnud. Después de identificar los factores que en el proceso de cultivo generan emisiones de CO2, se hicieron los cálculos de las fijaciones de carbono. El resultado final determinó que en el caso del cultivo de café en Colombia. Se captura 5,2 veces más carbono que el que se emite. Con un parque cafetero de alrededor de 4.500 millones de árboles de café, la captura neta de carbono es de cerca de 3 millones de toneladas. Esta cifra no tiene en cuenta que solo una parte de las fincas está sembrada en café y que en ellas se encuentran un sin número de árboles diferentes que también realizan su fotosíntesis con la correspondiente captura de carbono.

Que bueno sería que se reconociera ese papel benéfico que realizan los cultivadores del grano, a través de la emisión de bonos de carbono que se pudieran negociar internacionalmente, pero, este mercado está todavía en una etapa incipiente y falto de regulación robusta y justa.

Conozca los beneficios exclusivos para
nuestros suscriptores

ACCEDA YA SUSCRÍBASE YA