Los embajadores y los niños dicen la verdad

Señor Presidente, Armando Benedetti, lejos de ser un aparecido, fue su jefe de campaña.

Benedetti lo acompañaba en los aviones y las camionetas como su copiloto y organizó toda la estructura de campaña, incluyendo los eventos logísticos del Atlántico; en donde sabe exactamente qué pasó.

Estas son algunas de las frases del aún embajador Benedetti, antes de que saliera del país hacia Turquía. “No eran emprendedores” refiriéndose a quienes financiaron la campaña del Pacto en el departamento que logró su victoria. “En el momento en el que yo diga quién dio la plata aquí en la costa, yo sé qué es esa mondá”. “Tú qué no sabes historia, lee cómo empezó el proceso 8.000 y por qué empezó”. Gravísimo.

Estas son las frases célebres de su ex jefe de campaña a su ex jefe de gabinete. No es ningún invento de los medios de comunicación ni una conspiración de los grandes banqueros. Ahora, permítame referirme a algunos otros hechos relevantes que deben ser investigados y explicados con suficiencia.

Fuentes le dijeron a esta columna que el avión en el que se desplazaba Benedetti y en el que llegó la ex niñera de Laura Sarabia a Caracas, no fue pagado por los Torres, conocida familia de empresarios y políticos que esta jugada definitivamente con usted, señor Presidente. Si no fueron los Torres, financiadores de Benedetti y del Pacto, ¿entonces quién pagaba ese avión privado y a cambio de qué? El señor Carlos Eduardo Restrepo, dueño de Sadi, debe explicarle esa respuesta a las autoridades.

Así va la historia de los Torres. Poderosos en el Atlántico, Euclides Torres estaría relacionado con el alumbrado público y los Centros de Diagnóstico Automotor. Efraín Torres fue fórmula de Benedetti en 2018, y antes, en 2014, lo fue Pedro Flórez, esposo de Karina Llanos Torres. También tendrían negocios en el sector vigilancia y seguridad. El congresista Dolcey Torres fue el primero que se salió del grupo liberal para apoyar públicamente la reforma a la salud. Jugados con el Gobierno.

Quien llevó a los Torres a su campaña fue Benedetti. ¿Qué aportes hicieron con exactitud?, ¿sus empresas, como Simetric, tienen contratos hoy con el Estado?

La afirmación de Benedetti está conectada al escándalo de Nicolás Petro, sobre el que hay abundante evidencia que el país todavía no conoce. Audios de Máximo Noriega y otras pruebas están siendo revisadas por las autoridades para avanzar en la indagación sobre si ex capos de la mafia intentaron financiarlo, señor Presidente, o si se trató de un aprovechamiento de su hijo para comprarse mansiones de lujo y vivir una vida que con el trabajo honesto jamás habría tenido.

Que Benedetti señale que su familia ha sido amenazada es peculiarmente grave. Es verdad que hasta ahora no se conoce una prueba dura en su contra y el país debe cuidar la presunción de inocencia y la buena fe, mucho más para quien representa al Estado y es el jefe del poder ejecutivo.

El teflón de los presidentes en Colombia es abundante, pero las respuestas a todas estas preguntas tarde o temprano se conocerán.

Señor Presidente, no es una conspiración de los medios ni un golpe blando del poder contra su fuero. Es su jefe de campaña y es su ex jefe de gabinete y es su hijo. Y en cualquier país del mundo, estos hechos serían de suma gravedad y de toda la atención de los medios y la sociedad. No nos ponga más en riesgo.