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La traqueobronquitis infecciosa, también conocida como “tos de las perreras” es una enfermedad de vías respiratorias altas que afecta a los perros sin distinción de raza ni edad, aunque suele ser más común en los cachorros.
Este virus, asociado a la ‘Bordetella bronchiseptica’, debe su nombre común al hecho de que es en los espacios donde conviven muchos caninos que más se propaga, tales como las perreras, las guarderías, los criaderos o las casas donde conviven más de dos perros.
En general la traqueobronquitis canina es muy similar a un catarro común, incluso se puede prevenir de la misma manera: aplicando una vacuna.
Los síntomas son una tos seca y persistente no productiva, es decir, que el perro nunca arrojará nada de su garganta. También se evidencia debilidad y cansancio permanente.
Édgar Gutiérrez, director de la Clínica veterinaria de la Universidad de La Salle, explica que la manera más efectiva de identificarla es cuando se encuentra al perro tosiendo como si tratara de vomitar algo.
“Los dueños suelen consultar al especialista porque creen que su mascota se tragó algo que no debía”, dice.
Una vez en el consultorio, para confirmar que se trata de un caso de traqueobronquitis canina, el veterinario aprieta un poco su garganta para activar lo que llaman el reflejo tusígeno positivo, el mismo que provoca el dueño cuando tensa el collar o que surge naturalmente cuando el animal corre.
En algunos casos esta tos puede llegar a inducir al vómito, debido a la irritación que sufren las terminales nerviosas en la tráquea y los bronquios.
En teoría la enfermedad se pasa sola pero llega a ser muy incómoda para los propietarios y preocupante, porque ven a su mascota sin aliento y el ruido que producen continuamente llega a desesperarlos.
El tratamiento, además de la vacuna intranasal Nobivac KC (no es una inyección, sino que se aplica con un gotero en la nariz y solo requiere de una dosis), cuyo efecto se activa pasadas 24 horas, se puede complementar con otros medicamentos.
“Antibióticos, humidificadores de vías respiratorias y complejos vitamínicos también resultan de gran ayuda”, aconseja el doctor Édgar Gutiérrez a sus visitas.
Sin embargo, la traqueobronquitis canina no es una enfermedad mortal y además de la vacuna, es posible evitarla con los cuidados adecuados.
Una alimentación balanceada, protección de cambio de temperaturas, un esquema de vacunas completo y la higiene adecuada son el mejor camino para fortalecer las defensas.
Tenga en cuenta que
•la enfermedad se puede prevenir aplicando unas gotas que sirven de vacuna.
•Esta tos es altamente contagiosa, incluso con el contacto directo nariz a nariz.
Cuide a su cachorro y al adulto
En la primavera y el otoño de la vida de su mascota, es decir cuando aún es un cachorro y cuando llega a la vejez, el contagio de enfermedades puede ser mortal, por lo que evitar cualquier amenaza externa y tener los cuidados necesarios puede hacer la diferencia y evitará que el animal esté susceptible a otras enfermedades.
Las opiniones
Édgar Gutiérrez
Dir. Clínica veterinaria de la Universidad de La Salle
“Los dueños suelen consultar al veterinario porque creen que su mascota, por la manera de toser, se tragó algo y lo trata de vomitar”.
Ximena Guevara
Médica veterinaria propietaria del Consultorio Flappy
“La vacuna se recomienda a partir de los seis meses de edad y con frecuencia anual para mantener la enfermedad controlada”.