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Lechuga, rúgula, tomate, cebolla y alguna vinagreta podrían ser algunos de los ingredientes de una ensalada. Pero, ¿qué tal si en el Celler de Can Roca otro de los componentes es borojó? Y no solo un borojó, ¿sino uno producido en la Costa Pacífica colombiana?
Esto no está muy lejos de la realidad, pues Cooprojosefa (Cooperativa de productores y comercializadores de borojó de Doña Josefa) empezará a vender sus productos al mejor restaurante del mundo, gracias al apoyo que ha recibido de Bioinnova (Centro Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación para el Desarrollo Productivo Sostenible de la Biodiversidad).
Con sus operaciones, la cooperativa formada por 27 productores de borojó y creada hace poco más de un año, quiere convertirse en los mayores comercializadores nacionales de la fruta en 2020. Pero, ¿cómo lograron estar en la mira del mejor restaurante del mundo? Mábel Torres, directora ejecutiva de Bioinnova, señaló que tras un proceso de formalización, en el que los productores implementaron planes de negocio, de mercadeo y buenas prácticas agrícolas y de manufactura, Cooprojosefa participó en una convocatoria que abrió el Celler de Can Roca para seleccionar productos locales que hicieran parte de su menú en sus nuevos establecimientos.“De 45 productos, escogieron tres, entre los que están el café, la granadilla y el borojó”.
El borojó se vende por kilo y por unidad. Cada fruta tiene un precio de entre $2.000 y $3.000, y un kilo puede llegar a tener un valor de $1.800 en tiempos de escasez. En cada uno de los procesos no usan químicos.
Las Opiniones
Mabel Torres
Directora ejecutiva de Bionnova
“De 45 productos, escogieron tres, entre los que están el café, la granadilla y el borojó y estamos en el proceso de negociación para definir las condiciones comerciales”.
