La atleta antioqueña Caterine Ibargüen Mena (1984) sigue sumando razones para no dejar de sonreír como lo hace. Con los 14,90 metros que consiguió ayer en la final de triple salto en el estadio Nido de Pájaro de Beijing, en China, se llenó nuevamente de gloria. El título de bicampeona mundial se suma a las casi 30 victorias consecutivas que le han hecho ganar una fama inigualable.