El vicepresidente Angelino Garzón (1950) justificó lo invertido en su fracasada campaña para dirigir la OIT diciendo que las "dignidades del Estado" no pueden andar "como zarrapastrosos". No explicó a qué se refería, pero miles, quizá viajeros de clase económica que se sintieron ofendidos, alzaron voz de protesta y lo convirtieron en tema del día en Twitter. Garzón luego dijo sentirse orgulloso de su origen humilde, por el que valora viajar en primera clase.