El suizo, administrador graduado en la Universidad de Lausanne, es desde 1998 presidente de la Fifa, organismo que maneja los hilos del fútbol mundial. Ha promovido que el deporte abandere causas humanitarias. Pero ha sido cuestionado por restar importancia al racismo, y proponer el uso de ropas más sexys entre las mujeres futbolistas. Hobbies: Blatter es aficionado al tennis y el atletismo.