Josefina Klinger Zúñiga, fundadora de la Corporación Mano Cambiada, ya había buscado ayuda en el Gobierno, para su proyecto de Ecoturismo en Nuquí. En su momento logró reunirse con María Clemencia Rodríguez de Santos (1960), quien le dijo que debería ser la Mujer Cafam. Al recibir el premio, le envío al Presidente un mensaje con la Primera Dama: una reunión con las 22 mujeres finalistas, para recibir apoyo.