De acuerdo con un juez de la República, 90% de los personas judicializadas por porte ilegal de armas no son delincuentes, sino “personas del común que cometen un error, pues los delincuentes no se dejan coger por la justicia”. Adicionalmente 80% de quienes son culpables por estupefacientes son consumidores de drogas y no distribuidores, lo que hace reflexionar acerca de la pertinencia de la norma.