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Estos se elaboran utilizando materiales naturales, biodegradables y reciclables, sin componentes dañinos como los cancerígenos
Los productos eco friendly, o ecológicos, se distinguen por su fabricación respetuosa con el medio ambiente. Se elaboran utilizando materiales naturales, biodegradables y reciclables, sin componentes dañinos como los cancerígenos, mutágenos o teratógenos. Al elegir estos productos, los consumidores no solo contribuyen a reducir la huella de carbono, sino que también optan por alternativas que no representan un riesgo para la salud humana.
El uso de productos ecológicos también reduce las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto es fundamental en un contexto global en el que cada acción cuenta para mitigar el impacto del cambio climático. Los productos eco friendly no solo son beneficiosos para las personas, sino también para los ecosistemas y los animales, ya que no se prueban en ellos ni contienen ingredientes de origen animal.
El interés por los productos sostenibles no es una moda pasajera, sino un cambio de mentalidad impulsado por una creciente conciencia ambiental. Según un estudio de Statista, 89% de los consumidores han cambiado sus hábitos de compra en favor de productos más sostenibles. De estos, 30% afirma haber hecho un cambio significativo hacia este tipo de productos.
La Generación Z es la que más ha adoptado esta tendencia, destacándose por poner la sostenibilidad como un criterio clave al momento de tomar decisiones de compra. Desde botellas reutilizables hasta alimentos elaborados con desechos alimentarios, los productos ecológicos son cada vez más variados.
Estos no solo se enfocan en el reciclaje, sino que también promueven un modelo de negocio que prioriza la economía circular, donde los productos se diseñan para ser reutilizados y reciclados, evitando el desperdicio innecesario.
Greenpack se dedica a la creación de empaques ecológicos, y su fundadora, Sonia Méndez, explicó que sus productos están hechos a partir de materias primas como la celulosa de madera cultivada y el bagazo de caña de azúcar. Además, los pegantes utilizados son a base de almidones, mientras que las tintas y barnices son de base acuosa y aceites vegetales, lo que permite evitar el uso de plásticos y químicos nocivos. El compromiso con la sostenibilidad se extiende a todo su proceso, desde la fabricación hasta la eliminación de productos.