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La firma colombiana ha vendido, a julio, más de 130.000 unidades de accesorios y esperan cerrar el año con más de 180.000 vendidas
La pandemia golpeó y casi que destruyó a miles de empresas en el país, pero Sajú ha sido una de las marcas que han sabido aprovechar la emergencia y lanzar una colección especial de Sajú VS covid. Juan Pablo Pradilla, gerente general y Juan Manuel Agudelo, gerente financiero de la marca, hablaron con LR sobre una nueva línea de negocio, el cambio de imagen y la llegada a nuevos países.
¿Cómo los impactó la crisis ocasionada por la pandemia?
Con la llegada del covid tuvimos el peor mes en la historia de Sajú que fue abril, porque se nos cayeron 90% las ventas. Lo que hicimos ahí fue sacar una colección para recuperarnos con el único canal que teníamos abierto que era la página web de los seis que tenemos.
¿Cómo ha sido el comportamiento de esta colección Sajú VS covid?
A través los salva-oreja, el garfio del mono y los tapabocas, ofrecimos productos ideales para facilitar la vida en este momento. A cierre de julio, tres meses después del lanzamiento, hemos logrado vender más de 7.000 unidades de esta colección.
¿Por qué decidieron hacer un cambio de imagen cuando ya estaba posicionada?
El objetivo del cambio de imagen fue para pegar mejor en los mercados internacionales, porque la marca surgió de forma informal como por “mamar gallo” y no nos habíamos sentado a hacer organizadamente toda la creación. Esta es una mejora.
Cuando empezamos a ir al exterior los mercados nos veían muy artesanales y no queríamos que nos asociaran con un producto 100% artesanal, sino más de lifestyle. Apostamos por un Latino Brand y ser reconocidos no solo como una marca 100% colombiana, sino una marca local en todos los países de América Latina.
¿Cuáles son los nuevos productos por los que están apostando?
Vamos a tener tres nuevos productos por el momento y son el Monkey Stopper, el anti-Sajú y las gafas Sajú. El Monkey Stopper es un producto pensado para aquellos a quienes se les caen las gafas mientras hacen actividades extremas, es una pieza en silicona que va a las orejas y hace que las gafas no se caigan; el anti-Sajú es un pin magnético para quienes definitivamente no quieren usar un Sajú, y pueden usar en la ropa para colgar gafas, carnets o audífonos y finalmente las gafas Sajú que es nuestro próximo gran proyecto y son fabricadas a partir de plástico 100% reciclado.
¿Qué precio tendrán estas gafas nuevas?
Estas nuevas gafas tendrán un costo aproximado de $220.000 y estamos manejando un costo especial para personas que hagan la reserva con un precio de $132.000. El primer diseño será la referencia Cartagena que tendrá 20 posibilidades de colores y diseños que se adaptan a gafas con varios tipos de lentes y ópticos.
¿Cuáles son las nuevas categorías de cuelga gafas con este cambio de imagen?
Decidimos hacer una división más clara de las categorías de los cuelga gafas. Son Funk, que son las que se usan para paseos, vacaciones y algo relax; Formal, que es la categoría que es para todas las personas que quieren un cuelga gafas para otros momentos más formales; Fashion está a la vanguardia y usa materiales novedosos y chic; Urban es la competencia con tendencias mucho más urbanas; HandCrafted es todo el tema de cuelga gafas hechos a mano pieza por pieza, y finalmente está la categoría Sport, ideada para los deportistas extremos.
¿Cuántas unidades de sus productos han vendido hasta el momento?
A julio del 2020, hemos vendido más de 130.000 unidades de nuestros accesorios y esperamos cerrar el año con 180.000 unidades vendidas en todos los mercados.
¿Cuáles son los nuevos países que tienen en la mira para la llegada de Sajú?
Estamos en negociaciones con distribuidores internacionales para la llegada de Sajú en Emiratos Árabes, Uruguay, Costa Rica, Nicaragua y Chile. Queremos también cerrar negocios, con presencia de Sajú directamente, en México y otras partes como Estados Unidos.
¿Cómo fue la campaña de a2censo y cuál es el objetivo?
Lanzamos un proceso de crowdfunding a través de a2censo de la BVC, para recaudar $100 millones en deuda y hacer realidad las monturas. En dos horas logramos que 78 personas se unieran con recursos propios a nuestro proyecto.
Del total de encuestados, 67% aseguraron haber realizado pagos regulares por un suscripción o servicio de deporte o fitness en los últimos dos años
Si se cuenta con un buen presupuesto, hay figuras que cuestan $11 o $12 millones, y los más económicos del mercado llegan a $30.000 o $24.000