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La tasa de desocupación cayó a 9,6% en julio desde 11% del mismo mes en 2022. El ministro de Hacienda destacó la solidez del mercado laboral
La tasa de desempleo continúa por un mes más a ritmo de un dígito. El Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, divulgó este jueves que la tasa de desocupación fue de 9,6% en julio, es decir, tuvo un retroceso de 1,4 puntos porcentuales (pps) frente al mismo mes del año anterior (11%).
De acuerdo con el Dane, esta es la cifra más baja para el mes desde julio de 2015, cuando alcanzó 9,2%.
Ahora bien, en cuanto a la población en edad de trabajar, que suma 39,5 millones de personas, los ocupados fueron 23,18 millones de personas, con un aumento de 1,12 millones de empleos en el último año.
Por otro lado, la población desocupada fue de 2,45 millones de personas, 269.000 menos que en julio del año pasado.
Al desagregar las cifras por ciudades, Bucaramanga y su área metropolitana, así como Medellín poseen las tasas de desempleo más bajas entre las 23 ciudades capitales. La capital de Santander tiene una tasa de desempleo de 7,5% para el trimestre mayo-julio , seguida de Medellín con 8,6%.
Les siguen Popayán (8,8%), Santa Marta (9,2%), Pereira (9,3%), Tunja (9,3%), Manizales (9,7%) y Bogotá (9,9%).
Por el contrario, las ciudades con las mayores tasas de desempleo son Quibdó (25,4%), Ibagué (15,8%), Florencia (13,7%), Riohacha (13,6%) y Armenia (13,4%).
Estos datos los celebró el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, quien destacó la solidez del mercado laboral colombiano y la reactivación económica.
“Estas cifras son interesantes porque muestran que efectivamente está empezando el proceso de reactivación de la economía para finalizar el año con una tasa de crecimiento cercana a 2%”, aseguró Bonilla en una comunicación.
El ministro agregó que existe un equilibrio entre los trabajadores particulares y aquellos por cuenta propia, “de todas maneras, su participación en la distribución es equivalente a 52,7%”.
No obstante, para Daniel Franco, investigador económico de Anif, este dato ejemplifica una problemática de atención. “Eso es preocupante puesto que, a pesar de que el empleo continúe en aumento, el empleo de menor calidad, que no protege a los trabajadores, es el que impulsa ese crecimiento”, mencionó Franco.
Construcción (234.000), actividades artísticas (218.000) y comercio (176.000) ocupan el podio de las tres actividades que más aportaron en la creación de empleo en julio. Le siguieron alojamiento y servicios de comida (163.000) y transporte (122.000).
La única rama que registró un comportamiento negativo en el mes fue la de actividades profesionales, con un revés de 60.000 empleos.
“Particularmente, los empleos fueron sumados por el sector privado. Es una señal de que, a pesar de la desaceleración de la actividad, el sector privado todavía ha soportado favorablemente el desempeño del empleo total”, aportó Carolina Monzón, gerente de Investigaciones Económicas de Itaú.
En julio, vale apuntar, la tasa de informalidad también retrocedió hasta 56,4%, 1,8 puntos menos que en 2022.
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