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Venezuela ha reportado desde mediados de marzo combates con irregulares que vincula al paramilitarismo
La ofensiva de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana contra grupos armados ilegales en la frontera de Venezuela con Colombia obedece a un plan del Gobierno de Nicolás Maduro para desviar la atención internacional y ocultar su relación con "terroristas y narcotraficantes ", dijo el jueves la canciller colombiana.
Venezuela ha reportado desde mediados de marzo combates con irregulares que vincula al paramilitarismo, sin mencionar a los disidentes del acuerdo de paz que firmó el Gobierno de Bogotá con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) o al Ejército de Liberación Nacional ( ELN) que tienen presencia en la zona, según grupos de derechos humanos.
"El régimen ilegítimo de Maduro, como es habitual, busca desviar la atención internacional frente a la relación cómplice con grupos de narcotraficantes y terroristas como el ELN y disidentes de las Farc que por años han tenido refugio en Venezuela", dijo en una declaración la canciller de Colombia, Claudia Blum.
"Recientemente esa dictadura, intenta mostrar una imagen ficticia de lucha contra el crimen, pero el mundo conoce que el régimen de Maduro no respeta ningún marco de legalidad", agregó.
La declaración de la canciller colombiana se produjo dos días después de que Venezuela anunció que solicitó a las Naciones Unidas hacer gestiones para lograr un "canal de comunicación directo" con Colombia en medio de los combates en la frontera binacional.
El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, dijo que, aunque se envió un mensaje a la canciller colombiana para buscar canales de diálogo "la señora responde con un guion primitivo, irresponsable e ideologizado".
Previamente, el Gobierno de Bogotá denunció que los enfrentamientos armados en la zona limítrofe del departamento colombiano de Arauca y el estado venezolano de Apure están afectando a los civiles y pidieron respetar sus derechos humanos.
Al menos 5.000 habitantes del poblado de La Victoria, en Apure, abandonaron sus casas y huyeron a la ciudad de Arauquita, en Colombia, desde donde denunciaron abusos y asesinatos de civiles por parte de militares venezolanos. El ministro de Defensa de Venezuela, general Vladimir Padrino, negó las acusaciones.
Venezuela, que esta semana muerte anunció la creación de un comando especial militar en una zona fronteriza con Colombia, ha reportado la de ocho efectivos de sus de seguridad y de nueve integrantes de grupos armados ilegales.
Colombia, el principal destino de los emigrantes venezolanos que huyen del colapso económico y social de su país, anunciado en febrero que concedería un estatus de protección por 10 años a cerca de 1,7 millones de personas procedentes de la nación petrolera.
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