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Las zonas francas son claves para desarrollo de nuevos mercados.
En el desarrollo del foro de La República en la Universidad de la Sabana, Saúl Pineda, viceministro de Desarrollo Empresarial, explicó que a pesar de los esfuerzos del país por fortalecer su apertura económica a nuevos mercados particularmente en los últimos 15 años, el panorama sigue siendo el de una economía con bajos niveles en este apartado.
Prueba de ello es que las exportaciones de bienes y servicios representaron 15,7% del PIB nacional en 1960, mientras que en el último año, con más de cinco décadas de diferencia, su porcentaje fue 14,8% del valor total.
De este modo, Colombia se encuentra debajo del promedio latinoamericano en este ítem, ya que en la región el porcentaje se ubicó en 20,8% durante el último año.
Pineda expresó que esta situación ha llevado a que “hoy estemos a la altura de Brasil y Argentina como los países más cerrados de la región”.
Otro punto que afecta la apertura económica nacional son los niveles de productividad en diferentes sectores que, según el viceministro, “contrario a Chile y Argentina, la productividad colombiana está notablemente rezagada respecto a las principales economías del mundo”.
Por estas razones, es importante fortalecer el impulso a las zonas francas como áreas de incentivos para la internacionalización y desarrollo productivo pues, en general, en los países de América Latina se presenta una reducción sobre el impuesto de renta en zona franca sobre el territorio aduanero nacional. Las inversiones acumuladas allí ascienden a $43 billones que corresponden a 285% de su compromiso.
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