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La situación con los embalses es crítica, por lo que se cambió el estado del sistema eléctrico de vigilancia a riesgo, mientras se esperan las lluvias
A través de la circular 072 de 2024 la Comisión de Regulación de Energía y Gas, Creg, emitió una alerta por la situación en los embalses y la capacidad de generación eléctrica del país, señalando que el sistema nacional pasó de estar en estado de vigilancia a riesgo. Con la medida, se aplicará la Resolución 026 de 2014 también de la Creg, para evitar un posible desabastecimiento.
Es por esto que se activa, en su totalidad, la generación de energía con las plantas térmicas, hasta que el nivel de los embalses vuelva a estar en márgenes suficientes para el abastecimiento nacional.
“Su duración dependerá de la evolución de los aportes hídricos y la demanda de energía, la disponibilidad del parque de generación y hasta que el nivel del embalse del Sistema Interconectado Nacional alcance la senda de referencia para esta estación”, detalla la circular firmada por el director ejecutivo de la Creg, Antonio Jiménez Rivera.
Eso activa una serie de protocolos y mecanismos para evaluar los niveles de los embalses, la oferta de energía, además que activa estrategias para evitar posibles desabastecimientos.
El mecanismo para el sostenimiento de la confiablidad energética, como es denominada la estrategia, tiene cuatro puntos para tomar medidas sobre el sistema, y así garantizar la generación de la electricidad.
“La activación de este mecanismo garantiza que se tomen acciones anticipadas para gestionar eficientemente los recursos energéticos del país”, expresó el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho.
Lo primero es que se evaluarán los embalses y la oferta, periódicamente. En el proceso se compara el nivel de agua almacenada con la senda de referencia que deben tener todas las generadoras, y con eso se hace una proyección, con el fin de garantizar que los embalses cuenten con el agua suficiente para cubrir la demanda en temporadas secas.
Lo del almacenamiento es clave, pues de acuerdo con la Resolución 101 – 055 de 2024 de la Creg, ordena que en todos los embalses del país se guarde una determinada cantidad de agua, establecida con una senda que prevé un déficit en el nivel de esas represas, con el fin de atender la demanda de generación en el corto plazo, en caso de presentarse contingencias como las sequías.
“La activación temprana del Estatuto permitirá almacenar la cantidad de agua necesaria que, según la senda de embalsamiento, asegurará el abastecimiento de electricidad a los usuarios de manera segura y confiable”, explican desde la Creg y el Ministerio de Minas y Energía.
Lo segundo se ejecuta si el nivel de los embalses se acerca a la senda de referencia, pero los precios del mercado energético no activan las señales del cargo por confiabilidad, es decir, si las tarifas siguen muy altas.
“Esto implica que el define cuánta energía debe almacenarse y en qué embalses, seleccionando las plantas hidroeléctricas más eficientes y económicas para optimizar el uso de los recursos hídricos”, explicó el Ministerio de Minas y Energía.
El tercero va en línea con la circular de la Creg, que solicita el uso pleno de la generación térmica y renovable. Aquí también se incluyen las fuentes no convencionales de energía no renovable, con el fin de asegurar la demanda sin comprometer los suministros.
El cuarto es un tema más administrativo, pues señala que las autoridades monitorearán la situación, con el fin de tomar las medidas necesarias y oportunas para mitigar una posible crisis.
“Finalmente, el mecanismo se desactiva cuando los niveles de los embalses superan la senda de referencia o cuando los precios de la energía activan las obligaciones del cargo por confiabilidad. Asimismo, se concluye cuando la demanda energética puede cubrirse sin la necesidad de intervenciones adicionales en el mercado”, detalló el MinEnergía.
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