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En total, 337 personas que violaron el toque de queda fueron conducidas a la UPJ de Puente Aranda.
Hace unos minutos el presidente de la República, Iván Duque Márquez, en compañía del alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, dieron el reporte de la jornada del toque de queda en la noche del viernes. Explicaron que hubo un total de 13.000 uniformados, entre policías y militares que salvaguardaron el orden en la capital, los cuales continuarán con sus labores en el transcurso del día.
En cuanto a los ciudadanos que violaron el toque de queda, el Presidente señaló que un total de 337 personas fueron conducidas a la UPJ de Puente Aranda y que en este momento ya están regresando a sus hogares y lugares de trabajo.
También advirtió que debe hacerse caso omiso a las campañas que circulan a través de redes sociales, promoviendo el pánico en el país. Sobre el toque de queda, explicó que la presencia de los 13.000 uniformados "garantizó en la ciudad la efectividad de la medida", dijo el Presidente.
A su vez, el Alcalde de Bogotá, invitó a los bogotanos "a que tengan paciencia, que tengan resistencia". Advirtió que "vienen días duros y difíciles. Aquí no se trata de unos jóvenes que llevan a cabo manifestaciones espontáneas".
De los retenidos por violar el toque de queda, cuatro personas fueron judicializadas. En total se registraron 612 llamadas a la línea de emergencias reportando posibles ingresos a viviendas y conjuntos residenciales. Sin embargo, advirtieron que de estas llamadas, ninguno de los reportes fueron ciertos, así como que tampoco hay denuncias formales hasta el momento.
Advirtieron que continuarán los patrullajes en toda la ciudad, en especial en las localidades de Usme, Suba y Patio Bonito.
La convocatoria se desarrolló en las principales capitales del país y tuvieron como propósito alzar la voz ante la actualidad del Gobierno
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