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El líder global en desarrollo sostenible y cambio climático, Juan Verde, señaló que ser sostenible no deja de lado la rentabilidad
Durante el ForoLR "El cambio climático y los negocios" que se realizó esta mañana en Bogotá junto con Corficolombiana, se abordaron los retos y oportunidades que tienen las empresas en la actualidad para afrontar y aprovechar esta coyuntura.
En el encuentro, además, se realizó el panel: "Economía Verde: Una Gran Oportunidad de Negocio, Competitividad y de construir un Mundo Mejor y más Equitativo", que lideró Juan Verde Suarez, líder global en desarrollo sostenible y cambio climático.
El panelista señaló que hay muchas oportunidades en la actualidad para que las sostenibilidad no sea sinónimo de baja rentabilidad. "No es una cosa o la otra, ya estamos inmersos en una transición económica de bajas emisiones y es algo que llegará tarde o temprano, se trata de un tema de velocidad, pero ya no de decisión", dijo Verde.
Para el panelista, las compañías que dudan de dar el siguiente paso hacia procesos más verdes deben recordar que sin planeta no hay economía, con lo que tener un impacto positivo como empresarios puede incluso acelerar el bienestar en todos sus ejes.
Verde dijo que hay tres factor indiscutibles en la actualidad: El cambio climático es real y es el hombre el que lo está acelerando; es la mayor amenaza para la estabilidad de la economía, pero también, genera una oportunidad para dar un curso a las políticas.
El panorama en cuanto al impacto del cambio climático en la sociedad es angustiante, se estima que más de 100 millones de personas podrían quedar en la pobreza extrema, además de que se aumentarían las muertes y los refugiados climáticos a nivel mundial, lo que a su vez genera afectaciones a las empresas.
Para responder a este tipo de problemáticas, el panelista explica que, las grandes instituciones del mundo, además de los Gobiernos, tienen planeadas millonarias inversiones ( de más de US$30 billones) que irán a propósitos verdes.
"Hay que analizar el flujo de capital, y hacia dónde va el dinero. Estará en todo el mundo, y en Latinoamérica, que es una de las que más se va a ver afectadas con el cambio climático, habrá inversión en gestión de residuos, energías renovables, infraestructura, vehículos eléctricos. En todos los sectores estratégicos de la economía. El dinero va hacia lo verde", añadió.
Para el experto, ese flujo de capitales hacia la sostenibilidad implicará el fortalecimiento, por ejemplo, de los bonos verde, en los reportes de sostenibilidad, la rentabilidad asociada a políticas más responsables con el medio ambiente. Y, por su puesto, en un mayor número de empleos relacionados a la economía verde. (Más de 24 millones para 2030).
"Los empleados quieren tener propósito, aportar su granito de arena. Ya no solo les importa la reputación de una empresa, sino que 65% de los millenials quiere trabajar para empresas de las que se sientan orgullosos y hacía allí hay que mirar", dijo Verde.
Es tiempo de "resetear" el planeta
Durante su intervención, Verde también señaló que las cicatrices de la pandemia y las ansias por migrar a unos procesos más responsables con el ambiente son una oportunidad clave para las economías del mundo a tener un modelo más justo y equitativo, "de hacer un 'reset' de todos los errores que hemos cometido y que hoy representan una oportunidad de negocio".
El panelista señala que no se trata de un tema de dinero, porque el dinero está, e incluso algunas economías apuntan a inversiones millonarias para este fin, como el CAF, el Banco Mundial o el BID, que prevén hasta US$746.000 millones para la economía verde.
"Para allá va la economía mundial, ninguna empresa va a invertir para perder dinero, pero el único factor para determinar la viabilidad ya no será la rentabilidad económica, hay también un segundo pilar importante que son las personas, la sociedad y el ecosistema; y un tercer pilar que es el planeta, el único hogar que tenemos para desarrollar nuestra actividad económica", añadió Verde.
El reto ahora, según el panelista, será impulsar a los diferentes actores a aprovechar el momento de cambio y aventurarse a invertir en innovación, tecnología y mayor sustentabilidad. "¿Seremos capaces?", recalcó.
El caso Colombia
El panelista también se refirió a las oportunidades específicas del país y señaló que, por ejemplo, puede encontrar un buen mercado en materia de fertilizantes, productos agroquímicos y alimentos para economías como EE.UU. que están buscando descentralizarse de otras como China.
"Lo que pasó con EE.UU. durante la pandemia, que buscó medicamento, insumos médicos, eso no va a volver a pasar, ya no va a querer depender de un solo país, o solo de China, con lo que va a suponer una buena oportunidad para países como Colombia que tienen esta capacidad y esa seguridad alimentaria", añadió.
En cuanto a la transición energética y extractiva. Verde señaló que la discusión no es fracking sí o no, sino si es responsable, sí o no. "Si quieres ser pragmático en términos económicos no puedes ignorar las fuentes de ingreso, pero el fracking no es lo mejor en este momento para Colombia. No estoy seguro que sea la solución para Colombia, si tienes muchos otros países que pueden importar gas. Todo eso de al final es importante", y recalcó que, al final, no se puede hablar de una seguridad energética sin transición.
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