El mango y la mandarina, los alimentos que tuvieron las mayores alzas en febrero

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Inflación para febrero fue de 0,57% jalonada por educación y transporte

Desde Nueva York, Estados Unidos, Juan Daniel Oviedo, director del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) sorprendió a los analistas cuando informó que la variación de la inflación en febrero de 2019 fue de 0,57%; mientras que a del dato anualizado se ubicó en 3,01%, practicamente sobre la meta del Banco de la República.

En el mes, los mayores incrementos en los precios lo tuvieron los sectores de educación (4,48%) presionado por el alza en las matrículas; bebidas alcohólicas (1,05%) y transporte (0,78%) debido a la subida en el costo de los pasajes, indicó Oviedo, quien resaltó que con la nueva metodología estos rubros tomaron protagonismo.

Uno de los renglones que siempre llama la atención de los consumidores es el de alimentos, el cual tuvo un alza de 0,23% en el mes y de 2,29% en el año, lo que demuestra un “comportamiento muy positivo” según el director, puesto que el año había iniciado con preocupación por el posible impacto del Fenómeno de El Niño sobre los cultivos, y por consiguiente, sobre el precio de los productos.

Si bien el efecto del clima no afectó el valor de todos los productos, en febrero, las frutas fueron las que más sufrieron alzas en sus precios, a raíz de una menor oferta en las principales centrales mayoristas del país.

De acuerdo con el Sistema de Información de Precios (Sipsa) del Dane, los productos con los mayores incrementos en sus precios en febrero fueron el mango tommy, la mandarina y la maracuyá. El primero pasó de costar en promedio $1.689 el primero de febrero, a $2.837 para el último día del mes, un incremento de 67,91%.

La mandarina, que a principios de febrero estaba en $1.218 en las principales plazas de mercado del país, llegó a costar $1.791 el 28 de febrero, reportando un alza de 47,07% en el comparativo, mientras que la maracuyá incrementó su valor al público en 43,62%, pues pasó de $2.297 en el inicio de febrero a $3.299 al cierre de mes.

Por otro lado, los alimentos con las caídas más significativas fueron el pepino cohombro, que cerró el mes a $898 en promedio, a pesar de que arrancó en $1.410, logrando una baja de 36,34%; la habichuela, que con una caída de 31% pasó de cotizarse en $2.195 el primero de febrero a $1.501 el último día del mes; y el tomate, que inició febrero a un precio de $1.506 y culminó en $1.087, mostrando así una variación de -27,82% en su precio.

Fabián García, economista de Bbva Research, destacó que las presiones al alza que se esperaban por el efecto de El Niño en el precio de las frutas y las verduras no están materializándose, y destacó que esto incide en el dato de inflación mensual, pues mientras que con la metodología anterior del Dane el ponderado de los alimentos estaba en 28,21%, en la nueva canasta del Dane, los alimentos y bebidas no alcohólicas solo pesan 15,05%.

“Eso nos favorece, porque si tuviéramos un Fenómeno de El Niño, y el precio de los alimentos estuviera subiendo a tasas muy altas, que esto pese menos dentro de la canasta termina traduciéndose en una menor inflación total”, aseguró el economista de Bbva Research.

Precisamente, para el dato de la inflación de febrero las expectativas del mercado estaban en que los alimentos, los gastos en vivienda y en transporte tuvieran la mayor incidencia en la variación del Índice de Precios del Consumidor (IPC) del mes.

Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria, destacó que normalmente este mes reporta la inflación mensual más alta, o la segunda más alta del año. “Justamente en febrero hay muchos efectos de indexación que hacen que suba la inflación. La principal causa es educación, se actualizan las matriculas, también algunas cosas de transporte, y se sigue viendo el efecto, de alguna manera, de la subida del salario mínimo en enero y febrero”, explicó Olarte.

Cabe recordar que mientas que el peso de educación en la canasta anterior era de 5,73%, en la nueva es 4,7%; y transporte pasó de 15,9% a 12,6%.
En este punto, Felipe Espitia, analista macro de Alianza Valores, detalló que el alza se da como resultado del ajuste en las tarifas de los peajes, indexados al mínimo, y también por los aumentos en las tarifas del servicio público que se vieron en Bogotá. “También muchos de los aportes que se realizan vía salud de pagos complementarios y medicinas especializadas y prepagadas tienen un aumento por el lado del salario mínimo”, complementó el analista.

Por otro lado, Juan David Ballén, director de investigaciones de Casa de Bolsa, resaltó que a a nivel general “estamos por encima de las expectativas”, y que los diferentes riesgos que se estaban contemplando para el inicio del año han tenido un impacto menor.

¿Cómo le fue a las ciudades?

En cuanto a las ciudades, la inflación más alta de febrero se registró en Bucaramanga con 0,97%, y este dato se originó por el aumento del costo en los servicios públicos. Mientras que la urbe con menor inflación fue Santa Marta, donde se registró una variación de 0,14%. Allí, la reducción de precios del tomate fue uno de los principales factores para frenar el costo de vida en la capital del Magdalena.

En Bogotá se registró una variación de 0,69%. Los elementos que contribuyeron en mayor medida al índice en la capital fueron transporte, con una variación de 2,96 puntos porcentuales y la inscripción a carreras técnicas y tecnológicas, las cuales tuvieron un crecimiento de 5,01%.