Hubo una mayor recuperación del empleo femenino por el retorno a la presencialidad

El pasado viernes, el Dane reveló las cifras de empleo para marzo. Estas reflejan una notable mejoría frente al mismo mes de 2021. Este año, la cifra de desempleo se ubicó en 12,1%, reduciéndose 2,6 puntos porcentuales frente a su cifra de 12 meses antes.

Este resultado muestra no solo la recuperación de 480.000 puestos, explicados en gran parte por el desempeño del empleo femenino. Durante el tercer mes del año, la relación fue de casi dos empleos femeninos recuperados por uno masculino.

Esta tendencia se ha visto marcada en los últimos meses, con lo que la brecha de empleo femenino va recortando distancia cada vez más, aunque aún está marcada.

La variación de mujeres ocupadas creció 13% frente a su referente de 2021, mientras que la variación de hombres para los mismos periodos fue de 4,7%.

“El retorno a la presencialidad de universidades y colegios ha permitido que un gran número de mujeres vuelva a ingresar al mercado laboral, en unos casos consiguiendo empleo y en otros todavía buscando”, destaca Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria.

Precisamente, este es el factor principal de la recuperación de empleos en las mujeres. En primer lugar permite que muchas mujeres salgan de la categoría de fuera de la fuerza laboral y se reintegren al mercado.

Las cifras del Dane así lo muestran. En la variación anual hubo 4,7% menos de mujeres fuera de la fuerza laboral. Esta variación es significativa si se compara con el dato de hombres que fue de -0,9%. Esto quiere decir que hay más mujeres que han recuperado el empleo, o bien están buscando activamente.

En marzo de 2022 hubo 9,8 millones de mujeres fuera de la fuerza laboral, mientras que el año anterior el dato era de 10,3 millones que no estaban en el mercado laboral.

Este retorno al mercado laboral muestra cifras de recuperación de empleo relevantes. En marzo había 8,7 millones de mujeres ocupadas y 202.000 menos desocupadas frente a la cifra de marzo de 2021.

“De cada tres puestos, casi dos fueron asignados para las mujeres y vimos que también hubo una reinserción al mercado laboral de mujeres con una cualificación de educación técnica, también universitaria y con posgrados, lo cual es una noticia importante, dado que las personas antes se ubicaban o estaban sobre todo dedicadas a las tareas del hogar”, destacó Piraján.

Las ramas de ocupación en la que más proporción de mujeres hubo fueron comercio y reparación de vehículos con 21,1%; seguido por actividades artísticas y de entretenimiento, en el que se desempeña 13,7% del total de mujeres.

Gracias a reapertura de colegios y universidades, se espera que estas cifras sigan evolucionando de forma positiva en los próximos meses. De acuerdo con María Claudia Llanes, economista de Bbva Research, la participación de mujeres en el mercado laboral dinamizará la economía, ya que las mujeres se dedicarán menos a actividades no remuneradas y del hogar. Así mismo se podrán ubicar en servicios de cuidado, como el infantil y de personas mayores, por ejemplo.

Piraján destacó que si bien hay un avance la recuperación de empleos femeninos, aún sigue habiendo un rezago en la reactivación del empleo formal, por lo que es un reto que se debe enfrentar con políticas diferenciales. Así mismo destacó que se debe hacer énfasis en la creación y recuperación de puestos formales que siguen por debajo de la prepandemia.