MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
El Gobierno de Gustavo Petro presentó al Congreso la solicitud para ampliar el cupo de endeudamiento en US$17.000 millones, es el aumento más alto que se ha pedido desde Pastrana
Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, presentó ante el Congreso de la República las particularidades del proyecto de ley que busca ampliar el cupo de endeudamiento del Gobierno, desde US$70.000 millones hasta más de US$87.000 millones.
La ampliación que propone el Gobierno de Gustavo Petro es la más alta que se ha hecho en la historia. Supera al aumento que pidió la administración de Álvaro Uribe de US$16.500 millones, cuando el cupo quedó en US$28.500 millones. Y también a la de Iván Duque, cuando pidió aumentar el techo en US$14.000 millones en 2020.
En total se han hecho siete solicitudes para ampliar el cupo de endeudamiento y seis se han aprobado desde 2000, cuando el entonces presidente Andrés Pastrana lo fijó en US$12.000 millones.
Luego, durante los ocho años del Gobierno de Álvaro Uribe se subió dos veces, primero en los mencionados US$16.500 millones en 2002 y luego en US$4.500 millones en 2009 para terminar su periodo en US$33.000 millones.
Durante el Gobierno de Juan Manuel Santos también se amplió dos veces, por US$10.000 millones en 2013 y US$13.000 millones en 2015, para concluir su mandato con un techo de US$56.000 millones.
Y la más reciente fue la solicitud del expresidente Iván Duque durante la pandemia de covid-19, cuando se aprobó ampliar el cupo en US$14.000 millones hasta el techo actual de US$70.000 millones.
El exministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, se unió a las voces para que el Congreso apruebe la solicitud del Gobierno Nacional de ampliar el cupo de endeudamiento en US$17.000 millones para que quede en alrededor de US$87.000 millones.
Ocampo agregó que el techo de la deuda, incluso, se debe incrementar para que alcance a cubrir todo 2026 y no solo hasta agosto, que es la propuesta del actual ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.
“El proyecto de ley sobre el cupo de endeudamiento debe ser aprobado rápidamente por el Congreso de la República. Más aún, debe ser incrementado para cubrir todo 2026 y no solo los meses del actual Gobierno”, dijo el exministro Ocampo.
Agregó que “esto es esencial para garantizar el manejo responsable de la deuda, que ha sido una característica de Colombia aún en las coyunturas internacionales críticas, como la crisis latinoamericana de la deuda. Obviamente el manejo de la deuda pública debe hacerse dentro de la regla fiscal del país”.
De acuerdo con Ricardo Bonilla, de no aprobarse la ampliación del techo de la deuda, el país tendría que asumir un déficit de US$1.366 millones para el cierre de 2024. Explicó que la solicitud del cupo de endeudamiento cubriría las necesidades de caja en dólares para lo que queda de este año, para el próximo y hasta finalizar el gobierno actual en su fecha de agosto de 2026.
En cuanto a la extensión del cupo de endeudamiento, el líder de la cartera de Hacienda explicó que tanto para 2024 como para 2025, se destinarían US$2.346 millones para cumplir los compromisos de deuda con el FMI; y adicional a ello, se pagarían US$188 millones en intereses y US$3.205 en pagar las deudas con la banca multilateral y bonos.
Frente a la posibilidad de que no se apruebe la extensión del cupo de endeudamiento en el Congreso, el temor por una cesación de pagos se aviva. En un trino publicado por Gustavo Petro, dijo que contemplaría esta opción si la Comisión Tercera de la Cámara no aprueba el proyecto de ley.
Sin embargo, para Andrés Pardo, director de estrategia macroeconómica de XP Investments, esto es parcialmente similar a los riesgos hipotéticos que los mercados discuten cada vez que el gobierno de Estados Unidos solicita al Congreso un aumento del límite de la deuda en ese país.
La intención se conoció como parte de las conclusiones de una cita bilateral entre los presidentes Gustavo Petro y Emmanuel Macron
Con base en el reporte, la economía tuvo un crecimiento superior a Corea del Sur, México y la Unión Europea, que alcanzaron 1,7%, 1,5% y 0,9%, respectivamente
Desde la agremiación aseguraron que en varios rubros, las estimaciones no son realistas, o no corresponden a la ponencia del primer debate en la Cámara