En ocho meses el ICA no alcanzará a resolver admisibilidad

El plazo de ocho meses que le puso el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, al Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) para resolver la admisibilidad de los 16 productos prioritarios para el intercambio comercial con Estados Unidos es insuficiente, según expertos.

El subgerente de Protección Vegetal del Instituto, Carlos Soto, le dijo a LR, durante una entrevista concedida en abril, que antes de aceptar el ingreso de alimentos el país norteamericano “tiene que conocer el estatus sanitario de Colombia y evaluar los riesgos, por eso el protocolo de admisibilidad es una labor no de meses, sino de años”.

La semana pasada, el ICA y su homóloga Aphis sostuvieron una reunión bilateral para discutir los avances técnicos del proceso. Pero los acuerdos alcanzados no se conocerán hasta que Soto entregue un reporte al gerente de la entidad, Luis Humberto Martínez, y al propio ministro de Agricultura, por lo que los funcionarios se abstuvieron de dar declaraciones.

La imposición de Iragorri da la idea de que la falta de gestión del ICA es la causante de que no se llegue a feliz término en un proceso que comenzó en 2010 con el país norteamericano y que hasta ahora solo cuenta un logro consolidado a su favor: la importación de uchuva sin el tratamiento cuarentenario de frío.

Lo mismo se entiende de la carta que le envió el embajador de Colombia en Washington, Luis Carlos Villegas, al ministro Iragorri, el pasado 5 de septiembre, en la que señala que los 16 productos con potencial de exportación (entre los que están el pimentón, el melón, la sandía y el mango) no cuentan con acceso al mercado porque “no se ha surtido el proceso fitosanitario ante las autoridades”.

También resaltó que aunque se han dado importantes avances, los altos funcionarios estadounidenses “necesitan de mayor atención y compromiso, en particular, por parte de la entidad regulatoria responsable, el ICA”.

Sin embargo, para los gremios la realidad es otra y la carga no recae en otro que en el Estado. El presidente de la Asociación Hortifrutícola de Colombia (Asohofrucol), Álvaro Palacio, le presentó al Ministerio un plan a 10 años para impulsar el sector en el que se pide apoyo económico, asistencia técnica y disponibilidad de bienes públicos para el manejo de la poscosecha que los harían más competitivos, aunque también considera que los protocolos sanitarios son muy rigurosos y por eso toman tanto tiempo.

Contrario a esto el exministro de Agricultura Rubén Darío Lizarralde encuentra que ocho meses es un periodo de tiempo muy largo si se considera que “todo quedó estructurado y solo falta que le den el visto bueno; eso no tiene ningún misterio”.

El exfuncionario atribuye las demoras a Estados Unidos. “Temas como la propiedad intelectual tienen frenado al Gobierno, pero este no se puede quedar con eso, se tiene que mover para hacerle saber a los productores que quienes están quedando mal son ellos”, dice. De hecho, asegura que se ha avanzado más rápido con la Unión Europea.

Pero la carta de Villegas muestra una realidad diferente. En ella se asegura que Colombia no ha implementado el Plan Nacional de Vigilancia Fitosanitaria del Aguacate ni ha remitido al Departamento de Agricultura Usda-Aphis la información del último año, ambos fundamentales para lograr el ingreso.

En lo que sí coincide Lizarralde es en que la responsabilidad no debe recaer sobre el ICA, “son tan responsables como este el Ministerio de Hacienda y el de Agricultura”, así como los productores y gremios que tienen la responsabilidad de mejorar sus Buenas Prácticas Agrícolas, si es que quieren vender afuera”.

Al final estas diferencias representan un retraso más que tendrá que sumarse en el tiempo a los protocolos de seguimiento. El economista experto en agro y comercio y docente de la Universidad del Rosario Ricardo Arguello explica que algunos de esos procesos podrían ser homologados por las autoridades sanitarias, “pero eso solo se hace por la base de ensayo y error conforme se va implementando”.

Sin respuestas con respecto al proceso del aguacate hass
A pesar de que la admisibilidad del aguacate hass se viene tramitando desde hace cuatro años y de que el ICA ya entregó a las autoridades estadounidenses un plan de trabajo para exportar, la posibilidad real de comercializar aún parece lejana. Rodrigo Garavito, presidente de la Corporación de Productores y Exportadores de Aguacate Hass (Corpohass), asegura que con el cambio de ministro el proceso quedó congelado y no se ha podido retomar a pesar de que ya se acercaron a Iragorri a pedir que los atienda. “Ya enviamos una matriz del proyecto en la que recomendamos apoyo con capacitación y monitoreo de plagas, pero no tenemos respuesta”.

Las opiniones

Rubén Darío Lizarralde
Exministro de Agricultura
“El Gobierno tiene que ponerse las pilas y trabajar porque la admisibilidad no tiene ningún misterio, se trata de voluntad política y es lo que el país necesita”.

Álvaro Palacio
Gerente de Asohofrucol
“Estados Unidos incluso puede tener la razón parcialmente, porque en Colombia somos expertos en envenenar los productos aplicando muchos químicos”.