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La hidroeléctrica pasa a su etapa de culminación con 87,03% de avance. Se espera una visita de la Anla que dé luz verde al proyecto
El proyecto que generará 17% del total de la matriz energética nacional, Hidroituango, continúa con un buen ritmo de ejecución en sus dos primeras unidades. Por esta razón, Daniel Quintero, alcalde de Medellín y presidente de la junta directiva de Hidroituango, y Jorge Carrillo, gerente general de EPM, afirmaron que la primera turbina entrará en operación el próximo 26 de julio, dando cumplimiento al cronograma establecido por la empresa antioqueña.
Sin embargo, frente a la medida de restricción de las actividades ordinarias en el proyecto establecida por la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla), como consecuencia de la emergencia de abril de 2018, que destruyó los avances realizados en varios de los frentes de obra, aún hay incertidumbre, lo que podría ser un obstáculo para la puesta en marcha de las unidades.
El presidente de la junta directiva dejó en claro que se han adelantado obras destacadas por la consultora Pöyry en su informe. “Ya hemos raspado la montaña anterior a la presa para evitar riesgos sísmicos y, frente al vertedero, tenemos una verificación y revisión permanente de este frente. El vertedero está en perfectas condiciones y no es una preocupación porque tenemos plan A, B, C, D, E, F y el tiempo que ha estado operando, ha operado bien”, puntualizó el alcalde.
Frente a las recomendaciones en los frentes de obra realizados por Pöyry, EPM destacó que se ha avanzado en el taponamiento de los túneles que ocasionaron la emergencia en 2018, por lo que la otra semana el equipo de la consultora, junto con la Anla, realizarán una visita al proyecto para analizar estos aspectos, lo que puede incidir en el levantamiento de la medida restrictiva que, de no retirarse, significaría un obstáculo para el proyecto, ya que no podría entrar al operar en julio.
“La unidad 1 está completamente terminada, ya empezamos a poner equipos electromecánicos, los estatores, ajustando la obra para que no haya vibración en el momento en el que se ponga el rotor. Los controles los traemos armados, completamente probados; los transformadores están listos y los cables de potencia también”
“A medida que Hidroituango vaya entrando en operación, los usuarios sentirán un impacto director en su factura y en la tarifa mes a mes. No solamente se trata del afán de recuperar los recursos del proyecto, sino de mejorar la autosuficiencia energética y los precios de la energía”.
De acuerdo con Quintero, el proyecto acaba de entrar en su fase final, de terminación, con un nivel de avance de 87,03%, por lo que, junto a los 80 contratistas de la hidroeléctrica, decidieron de manera conjunta fijar la fecha límite para su entrada en operación.
En este sentido, cabe recordar que el mandatario de la capital de Antioquia sostuvo una reunión con los alcaldes de los municipios de la zona de influencia de Hidrotuango, donde se concluyó el apoyo a la entrada en operación del proyecto, teniendo en cuenta que 3% de los recursos que recibe la hidroeléctrica se destinan a la inversión en los territorios y en las comunidades aledañas.
Así, el gerente de EPM, dio un parte de tranquilidad para las comunidades aguas abajo y para los municipios involucrados en el desarrollo del proyecto. “Podemos afirmar que el proyecto está estable”, afirmó el directivo. El directivo de EPM también especificó que “pasamos de la etapa de continuidad de Hidroituango a la etapa de culminación. El proyecto está controlado”.
Con esta obra, EPM espera generar US$1 millón diario y convertirse en una empresa carbono neutral. Este monto servirá para subsanar los costos adicionales, que rondan los $12 billones, como consecuencia de lucros cesantes y retrasos.
Cabe resaltar que 17% de la matriz energética nacional (generación que espera aportar el proyecto) equivale a 2.400 MW de capacidad instalada, los cuales estarán soportados en ocho unidades, donde cada una entregará cerca de 300 MW. Y es que, analizando el avance de los frentes de obra, son pocas las labores restantes para que la primera turbina aporte recursos eléctricos al Sistema Interconectado Nacional (SIN).
Así lo explicó William Giraldo, vicepresidente de generación de EPM y encargado directo de la ejecución del proyecto, quien agregó que la unidad 1 está con un avance superior a 90% y la unidad 2, por encima de 80%. Giraldo mencionó que “en la turbina uno, falta instalar equipos electromecánicos, instalar el estator y el rotor y falta, además, el blindaje del tubo que va hacia el embalse, lo que podría demorar seis meses”.
Es así como el agua entrará por los tubos y moverá las turbinas; el rotor, dentro del estator, sacará la generación a los transformadores, para después llegar a los cables de potencia y posteriormente realizar la conexión al SIN. En este punto, es de destacar que cada turbina tendrá tres cables de tensión y tres transformadores, lo que permitirá disminuir el caudal del vertedero hasta en 170 metros cúbicos por segundo.
A su turno, el alcalde de Ituango, Mauricio Mira, hizo énfasis en la importancia de la entrada en operación del proyecto, debido a que este hito generará más regalías. En la misma dirección opinó Olga Cecilia Arroyave, alcaldesa de Valdivia, uno de los municipios aguas abajo, quien afirmó que los territorios, a través de EPM, van a tener mucha más inversión para desarrollar obras como el centro de salud.
Además, la puesta en marcha de la segunda unidad se deberá realizar antes del 30 de noviembre de 2022, según el límite establecido por la Creg. Además, la empresa indicó que el río está pasando por el canal derecho de la presa, que tiene tres compuertas, por lo que mañana el caudal será trasladado al canal izquierdo con miras a hacer mantenimiento y aprovechar las condiciones hidrológicas del afluente del Río Cauca.
Por otro lado, la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios dejó en firme la sanción impuesta a EPM por un valor de $1.817 millones, al no poner en operación comercial del proyecto hidroeléctrico en diciembre de 2018. Mediante la Resolución 20222400034375 del 31 de enero de 2022, la Superintendencia resolvió el recurso de reposición presentado por EPM y confirmó que, debido al retraso en la puesta en operación de Hidroituango, la empresa incumplió la fecha de inicio del periodo de vigencia de las Obligaciones de Energía en Firme que le fueron asignadas por la Creg, en subasta realizada en junio de 2008.
La Superservicios estableció que EPM no logró desvirtuar su responsabilidad por la no entrada en operación del proyecto, lo que implicó un incumplimiento regulatorio, así como un riesgo de desabastecimiento de energía eléctrica en el país, hecho que llevó a la Creg a la convocatoria de una nueva subasta de expansión para cubrir el déficit de energía, sin afectar el suministro a mediano plazo.
Frente a este punto, Quintero afirmó que con el flujo de caja que espera generar la generación en las turbinas, será más que suficiente para poder hacer frente a la sanción, por lo que se espera que el proyecto continúe en curso y puedan ser puestos 600 MW a final de 2022.
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