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Hoy se darán a conocer las propuestas, en las que se incluiría eliminar exenciones y aumentar la base del impuesto de renta
Hoy se darán a conocer las recomendaciones de la Comisión de Expertos en Beneficios Tributarios, que serán las bases de la próxima reforma fiscal que el Gobierno espera presentar la siguiente semana. Varias han sido las propuestas que se han hecho frente a este tema. El IVA es una de las más controversiales.
Aumentar la tarifa de este impuesto en los bienes que están excluidos, exentos o gravados con 5% ha estado en la mira de varios centros de pensamiento y analistas, pues sus costos fiscales ascendieron a $74,93 billones en 2019, según cifras de la Dian. En este frente, uno de los expertos de la Comisión, Brian Arnold, dijo a LR que idealmente todos los bienes y servicios deberían estar gravados con el IVA.
“Si sometemos todos los bienes al IVA, recaudamos más ingresos y luego lo que tenemos que hacer es devolver el dinero en un mecanismo de compensación para las personas pobres que tienen que gastar más porcentaje de sus ingresos en los bienes básicos que los ricos”, explicó Arnold.
Sin embargo, esta sería una decisión difícil de tomar en términos políticos, por lo que una recomendación inicial sería aumentar la tarifa solo en algunos bienes, propuesta que también mencionó el experto de la Comisión Kent Smetters a El Espectador, así como aumentar el número de hogares a los que hoy se les devuelve el impuesto.
De hecho, el ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla explicó en una columna de opinión que el IVA es ‘poco solidario’ pues, al ser un impuesto indirecto, no se paga en base a los ingresos, sino que todos deben pagar la misma tarifa, por lo que las exenciones y exclusiones terminan favoreciendo a los más ricos.
Así, según Carrasquilla, se debe aumentar la devolución del IVA. “Podríamos empezar por darle un golpe mortal a la injusticia derivada del IVA, profundizando de manera sustancial y muy rápida la compensación anticipada del IVA que hoy ya hace parte de nuestra política social, ya le llega a más de un millón de hogares pobres y muy pronto les estará llegando a unos dos millones”.
Cabe mencionar que el presidente Iván Duque descartó gravar alimentos básicos, como el pollo, la leche o el arroz, y mencionó que esta sería una reforma social, solidaria y sostenible. Sin embargo, aún cabe la posibilidad que se graven otros bienes y servicios.
Una segunda recomendación estaría encaminada a eliminar ciertas exenciones tributarias e incentivos fiscales que hay hoy en el sistema. “Se deben eliminar algunos de los incentivos fiscales que realmente no tienen ningún sentido. Lo que estos suelen hacer es que destruyen el comportamiento económico porque hay mayor inversión en algunas áreas y menos en otras, también incentivan la evasión fiscal”, explicó Arnold.
De hecho, algunas propuestas de centros de pensamiento están en este camino. Fedesarrollo, por ejemplo, propuso revisar y eliminar ciertas exenciones sectoriales, como los mecanismos de zonas francas y el descuento del ICA.
“Como país debemos avanzar y hacer un estatuto tributario mucho más simple, pero especialmente que trate de igual forma a todas las actividades productivas”, explicó Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo.
La tercera recomendación de la Comisión sería ampliar la base gravable del impuesto de renta y, como lo explicó Arnold, también se debe incentivar la formalidad laboral.
“Creo que en su ejercicio de reforma tributaria es importante intentar atraer a más personas a la economía formal para que reciban los beneficios, pero también que estén sujetos a impuestos una vez que sus ingresos lleguen a los niveles apropiados”, manifestó.
De acuerdo con lo que explicó Smetters a El Espectador, se deberían eliminar las exenciones que hay hoy en el impuesto de renta. Según cifras de la Dian, los costos fiscales asociados al impuesto de renta ascendieron a $17,1 billones en 2019, de los cuales el 65% correspondieron a las rentas exentas, mientras que 30,1% fueron de los descuentos tributarios y 4,9% de deducciones por invertir en activos fijos.
Un cuarto punto sería hacer una reforma a la manera en la que se gravan las pensiones en el país pues, según Arnold, estas son demasiado generosas. “Los ricos pueden beneficiarse de este sistema mucho más y sospecho que hay muchas personas pobres en Colombia que no tienen pensiones. Su sistema para gravarlas está mal reformado”, explicó el experto.
Una última recomendación, según Smetters, sería crear una organización que sea independiente del Gobierno, y que se encargue de analizar la política pública en temas de gasto fiscal.
Aunque estas son recomendaciones que se pueden adaptar en el corto plazo, los expertos resaltaron que el sistema tributario colombiano tiene muchas deficiencias y, por lo tanto, se debe hacer una revisión de todo el sistema a largo plazo.
“Necesitan hacer una revisión de todo el sistema y eso no va a suceder en un año. Se necesita un esfuerzo dedicado a largo plazo por parte del Gobierno, del Ministerio de Hacienda y de la Dian para lograr esos objetivos. Hemos establecido algunos puntos que se pueden hacer pero hay algunas cosas que creemos que no se van a lograr a corto plazo”, dijo Arnold.
Analistas esperan que la próxima reforma recaude menos de lo previsto
A pesar de que el Ministerio de Hacienda busca recaudar 1,5% del PIB con la próxima reforma tributaria, algunos analistas consideran que esta proyección es optimista. Según BNP Paribas, la reforma no aumentaría los ingresos en más de 1% del PIB. Además, los expertos de la firma esperan que en la tributaria se eliminen exenciones sobre el impuesto de renta, una propuesta que está en línea con las recomendaciones de la calificadora Moody’s, la cual afirma que los cambios deben centrarse en reducir exenciones tributarias.
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