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Desde 2012, cuando asumió la presidencia Juan Manuel Santos, el país ha pasado por seis tributarias y la más ambiciosa fue la de 2021
El presidente electo Gustavo Petro ha hablado de adelantar una reforma tributaria que sería la más grande adelantada por un gobierno. En un primer momento afirmó que sería de $50 billones, pero en los últimos días ha dicho que podría ser incluso de $75 billones.
Ahora bien, la reforma más ambiciosa que se ha hecho en el último decenio fue la hecha en 2021 por el Gobierno de Iván Duque cuya meta de recaudo extra es de $15,2 billones. Las anteriores oscilaban entre $7,1 y $12,5 billones.
Para lograrlo, la cartera de Hacienda, en cabeza de José Manuel Restrepo, propuso una serie de medidas como aumentar el impuesto de renta corporativa a 35%, extender la sobretasa de renta para el sector financiero en tres puntos porcentuales y transformar la factura electrónica para luchar contra la evasión.
Desde 2012, cuando asumió la presidencia Juan Manuel Santos, el país ha pasado por seis procesos similares, tres en sus ocho años de mandato y tres en los cuatro años del Gobierno de Iván Duque. Con esto, en promedio, cada 20 meses el país tiene una tributaria, aunque en el último Gobierno este promedio se acorta hasta 16 meses por ley.
Una de las críticas que se ha hecho a estos múltiples procesos es que son pensados en el corto plazo y no con el ánimo de lograr ingresos permanentes que eviten que haya que hacer tantos cambios. Luis Carlos Reyes, director del Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, explica que el impacto de esto es que se pierda inversión, pues los empresarios no tienen la seguridad con respecto a los tributos.
Por ejemplo, el impuesto al patrimonio ha entrado y salido de las reformas, pues se ha implementado de forma temporal. Por ejemplo, en la reforma de 2014 se eliminó y en 2018, Duque intentó revivirlo con la tributaria que fue declarada inexequible.
Posteriormente, en 2019 se retomó pero no de forma permanente sino para 2020 y 2021. De esta forma, en 2022 este impuesto no está vigente.
Ahora, el presidente electo Gustavo Petro propone revivirlo para aquellas personas con patrimonios superiores a $1.000 millones.
Este es un caso contrario al del Gravamen a los Movimientos Financieros conocido como4x100. Este entró inicialmente como un impuesto temporal y que se empezaría a desescalar. Se creó inicialmente en 2018 y duraría un año.
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