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Ambas propuestas conservan la reducción progresiva del impuesto de renta empresarial, bandera del exministro Ricardo Bonilla
Entre una batería de nuevos artículos y la eliminación de otro grupo, el documento de la ponencia positiva para la reforma tributaria o ley de financiamiento contempla una nueva lectura profunda sobre las intenciones fiscales del Gobierno Petro para los años venideros.
El principal titular es que se mantiene la reducción progresiva del impuesto de renta corporativo, un tema que se convirtió en punta de lanza del Gobierno desde que se presentó el articulado original el pasado 10 de septiembre.
La propuesta busca la reducción paulatina del impuesto de renta corporativo de 34% actual a una tarifa diferencial que será de 27% para Mipyme; de 30% para las empresas medianas y de 33% para las grandes corporaciones del país. Los ajustes comenzarían de inmediato el próximo año para el primer grupo, mientras que para los otros dos serán paulatinos hasta 2039.
No obstante, esto no aplicaba para todas las empresas. Por ejemplo, se contempla una sobretasa de cinco puntos para el sector financiero y otra para el sector extractivista de carbón y petróleo que, a diferencia del primer proyecto, se ajusta y se incrementa hasta 20%.
Esta medida, seguida de la nueva distribución progresiva de la sobretasa al sector extractivo despertó alertas en los gremios productivos.
Otras propuestas que también se mantiene son la consideración de adelantar la regla fiscal para 2025; la implementación de un mecanismo de regla fiscal verde y la eliminación del régimen simple de tributación, que la Ocde destacó en un pasado informe sobre perspectivas económicas del país.
El postulado plantea que esta iniciativa especial de tributación finalice en enero de 2026.
Javier Blel Bitar, socio de Tax Controversy de Deloitte, mencionó que “también se mantiene el aumento a 41% de la tarifa marginal para personas naturales residentes sucesiones donaciones y asignaciones modales declarantes que tengan un promedio de ingresos superiores a $120 millones mensuales”. Este gravamen hoy en día está en 39%.
El experto tributario también destacó que se mantiene el aumento a 25% de la tarifa general del impuesto complementario a las ganancias ocasionales provenientes de loterías rifas impuestos y similares que actualmente es de 20%.
Otros punto importante que también conserva la nueva reforma fiscal es la propuesta de conciliar o terminar por mutuo acuerdo los procesos que tienen los contribuyentes con la Dian haciendo el pago del capital.
También se mantiene la propuesta de ampliar la sujeción de impuestos al patrimonio a las sociedades nacionales, asimiladas y establecimientos permanentes de sociedades extranjeras sobre activos fijos reales no productivos.
En la ponencia positiva presentada por la representante Olga Lucía Velázquez, con afinidad al Gobierno, también hay una serie de artículos que se mantienen de la versión previa pero que incluyen unos cambios considerables.
El primero de ellos, como se mencionó, es el de la sobretasa de renta para el sector financiero y también para las industrias extractivas de carbón y petróleo, una iniciativa que viene heredada desde la primera reforma tributaria del Gobierno.
Otros postulados que también entran es la exención de IVA para municipios pequeños, menores de 200.000 habitantes, en una serie de servicios como alojamiento de hoteles o en centros vacacionales.
Antes, esta medida no tenía plazo de aplicación, pero con la ponencia positiva, el Gobierno definió la existencia de este mecanismo para los siguientes tres años de vigencia de la ley, por lo cual, en caso de ser aprobada, funcionaría hasta 2028.
Para este postulado también aplicarán alojamientos rurales, apartahoteles, camping, actividades de agencias de viaje, operadores turísticos, organización de convenciones y actividades de parques comerciales, entre otras iniciativas.
En su momento, el Ministerio de Comercio explicó que esta medida busca darle un impulso al turismo en zonas alejadas del país, objetivo del Gobierno.
El Gobierno está en una carrera contrarreloj para aprobar el proyecto de reforma tributaria, que ya solo contempla obtener $9,8 billones, tras los cambios entre el texto radicado originalmente y la ponencia positiva. Las sesiones del Congreso finalizan el próximo 16 de diciembre y, aunque el Gobierno convoque a sesiones extras, los expertos aseguran que no hay ambiente en el Legislativo.
“Es factible que el proyecto no sea aprobado teniendo en cuenta que solamente fue firmada por siete congresistas”, aseguró Javier Blel Bitar de Deloitte.
El documento se presentará mañana martes ante las comisiones económicas del Congreso y se debatirá el miércoles 11 de diciembre
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