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Los expertos aseguran que no se puede abandonar la explotación de petróleo: el próximo presidente debe seguir el camino de la transición energética
La explotación y exploración de petróleo es otro de los grandes retos que enfrentará el próximo Gobierno de Colombia. Esta administración dejará en el tintero algunos temas importantes como la transición energética, la viabilidad del fracking y el rumbo que tomará durante los próximos años el peso de la explotación de hidrocarburos en las exportaciones. Algunos candidatos proponen abandonar totalmente el modelo, mientras otros piensan en una sustitución progresiva.
Julio César Vera, presidente de fundación Xua Energy, asegura que cortar la producción de petróleo durante los próximos años es inviable desde el punto de vista económico para el país. “Pensar que Colombia pueda sacrificar sus posibilidades y potencial que aún tiene en materia de exploración y explotación de hidrocarburos no es viable, ni en el corto ni mediano plazo”, aseguró.
El experto afirmó que Colombia debe avanzar en un proceso de transición energética responsable; los hidrocarburos, según dijo, deben ser usados como una palanca de valor para la transición productiva hacia otras industrias de valor y así abandonar poco a poco la dependencia de la industria extractiva.
Isidro Hernández, docente e investigador de la Universidad Externado de Colombia, asegura que el petróleo no se reduce a un tema meramente energético, sino que su explotación abarca muchos más productos. “La gasolina, el diesel y el GLP son solo una parte de la producción petrolera. En la economía moderna son muchos los productos que salen de la petroquímica, como algunos tipos de plástico”, aseguró.
El experto añadió que la transición energética no es sinónimo de abandonar completamente la explotación, pues los derivados el petróleo abarca más productos en la vida cotidiana que la gasolina. Sobre la transición a energías más limpias, Hernández puntualizó que el nuevo presidente de Colombia deberá trabajar sobre la base que dejaron las últimas dos administraciones. “Deberá tomar los programas, revisarlos, corregirlos y no reinventar uno nuevo porque se perderían elementos importantes, como la generación eólica que hay en La Guajira”, aseguró.
Sobre el fracking, el economista afirmó que el Gobierno debe desarrollar unos estudios previos, los cuales deben estar lo “menos ideologizados posibles” para no estar en contra ni a favor del fracking. “Si se logra un estudio técnico que revele costo-beneficio en materia ambiental, y este llega a ser demasiado elevado, se debe abandonar la explotación; pero se debe garantizar el abastecimiento de petróleo”, aseguró.
Vera afirmó que toda la industria petrolera bajo el próximo gobierno (incluidas las cadenas de refinación y transporte, etc.) debe estar comprometida con el proceso de carbono neutralidad que quiere lograr el país, además de la reducción de más de 50% de emisiones para el año 2030. “Algunos deben optimizar operaciones para reducir las emisiones y otros deberán efectuar procesos de compensación vía reforestación de otras áreas”, dijo.
El experto afirmó que los proyectos piloto de investigación integral deberán ser desarrollados por el próximo gobernante en dos años. Durante este lapso, lo ideal sería llevar a cabo una etapa de perforación, evaluación y revisión de resultados: dependiendo de esto “se decidirá, con hechos y datos, si es posible desarrollar una explotación masiva y comercial de los yacimientos no convencionales en Colombia”.
Según Juan Pablo Fernández, experto del sector petrolero, el país necesita sostener la senda de inversión tanto en exploración como en desarrollo. “Ojalá enfocado en las explotaciones convencionales porque los riesgos económicos y socio ambientales de la explotación no convencional son muy altos”, aseguro. Afirmó que el principal reto del próximo presidente es garantizar la autosuficiencia en materia de gas y petróleo para evitar la importación de estas materias primas.
“El país puede ir avanzando en un proceso de transición energética responsable, pero cortar la producción de petróleo no es viable desde el punto de vista económico”.
“No puede haber un abandono de la exploración y explotación: se debe hacer una transición tecnológica en materia de combustibles y mirar cómo va el mundo en productos derivados del petróleo”.
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