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La de mayor presupuesto es la ANI, con cerca de $2,5 billones
Desde que el presidente Juan Manuel Santos asumió la presidencia en 2010, creó 14 agencias nacionales o convirtió en estas a entidades que ya existían. Aunque este incremento de las instituciones es criticado por el aumento de personal que suponen, los expertos reconocen que en algunos sectores han sido útiles, aunque señalan que el próximo gobierno sí debería revisar el funcionamiento de algunas.
En el primer caso están entidades como la Agencia Nacional de Minería (ANM), la Agencia Nacional de Tierras (ANT), la Agencia Colombiana para la Reincorporación y la Normalización (ARN) y la Agencia Nacional de Seguridad Vial (Ansv).
Lo segundo fue el caso del Instituto Nacional de Concesiones (Inco), que por medio del decreto de reforma institucional 4165 de 2011, se convirtió en la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), que está a cargo de la estructuración y adjudicación de las vías pertenecientes al programa de Cuarta Generación (4G).
Casos similares son los de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y la Agencia Nacional del Espectro (ANE), las cuales fueron creadas antes de que Santos llegara al poder, pero modificadas bajo su mandato. Si bien mantuvieron sus nombres, por medio de los decretos 4137 de 2011 y 4169 de 2011 respectivamente, sus naturalezas jurídicas fueron modificadas.
Para Édgar Alfredo Gutiérrez, consultor de políticas públicas, todas estas agencias se crearon con el propósito de contar con entidades altamente técnicas y especializadas.
“El objetivo de una agencia es gestionar un tema estratégico a través de proyectos, los cuales requieren perfiles altamente técnicos y con unos requisitos particulares”, señaló.
Además, tienen dos características principales. Una es que cuentan con una nomenclatura especial, es decir, tienen denominaciones de empleos diferentes a las que rigen a las entidades de la rama ejecutiva. La otra es que sus estructura son planas, pues solo tienen dos niveles jerárquicos.
“De esta manera el recurso humano se puede mover en las diferentes dependencias de acuerdo a las necesidades, pues funcionan por proyectos”, dijo.
Otra característica de las agencias es que pertenecen al sector descentralizado, lo que implica que según su actividad pueden generar recursos propios y/o depender de la nación.
Según el decreto 2236 del Ministerio de Hacienda, en el que se establece el presupuesto para 2018, la agencia con mayor presupuesto este año es la ANI, que cuenta con cerca de $2,5 billones. De estos, poco más de $2,2 billones provienen de la Nación mientras que el resto son recursos propios.
De acuerdo con el mismo documento, la ANH, la Agencia Logística de las Fuerzas Militares, la Ansv y la ANE este año no recibieron aporte nacional, sino que su presupuesto es de recursos propios. En cambio, en el caso de la Agencia para Renovación del Territorio, el total de su presupuesto para 2018 proviene de aportes de la Nación.
Para el ex ministro de Hacienda Guillermo Perry, la ANI, la ANH, la Agencia Nacional de Contratación Pública - Colombia Compra Eficiente y la ANM han sido casos exitosos.
“Estas se crearon porque sus respectivos ministerios no tenían la facilidad técnica para desarrollar los proyectos que las agencias realizan. El próximo Gobierno debe cuidar las que están funcionando bien y nombrar gente capacitada, no cuotas políticas”, resaltó.
Por la flexibilidad de la estructura y del recurso humano, este modelo organizacional se extendió y el Gobierno creó cada vez más agencias hasta llegar a las 17 que están vigentes actualmente. Es importante mencionar que estas agencias no solo fueron adoptadas por presidencia, sino que los gobiernos locales también crearon varias de ellas. Según la base de datos del Sistema de Información y Gestión del Empleo Público, además de las 17 agencias nacionales, en el país hay siete agencias territoriales.
“El próximo Gobierno debería revisar todas estas agencias pues por su operación y realidad no todas deben tener esta naturaleza. Hay algunas que manejan temas que perduran en el tiempo y que requieren personal tradicional, no por proyectos. Yo creo que solo la tercera parte son realmente agencias”, dijo Gutiérrez.
“Tal vez lo que hacen las agencias hoy, en el pasado lo hayan hecho los ministerios con un menor presupuesto. Sin embargo, no lo hacían tan bien ni se veían los resultados”.
“Considero que es un esquema óptimo porque requiere que operen bajo resultados. En la medida que se gestionan proyectos, es más fácil hacer seguimiento y gestión”.
A pesar de la gran cantidad de agencias, tanto Perry como Gutiérrez consideran que en sectores como infraestructura y transporte sí ha habido avance.
Los ministerios con más agencias nacionales
El Ministerio de Agricultura es el que tiene mayor cantidad de agencias adscritas, con tres de ellas. De esta cartera hacen parte la Agencia para la Renovación del Territorio, la Agencia de Desarrollo Rural y la Agencia Nacional de Tierra. Los siguientes son los ministerios de Minas y Transporte, que tienen dos agencias inscritas cada uno. Del primero hacen parte la Agencia Nacional de Hidrocarburos y la Agencia Nacional de Minas, mientras que del segundo son la ANI y la Ansv.
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