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El Ideam indicó que para marzo la amenaza se podrá intensificar debido al aumento de las lluvias, en algunas zonas del país
En los últimos días, el país ha experimentado intensas lluvias que han ocasionado afectaciones a importantes vías y sectores del territorio nacional.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) indicó que estas precipitaciones son propias de la temporada. Sin embargo, las variables meteorológicas durante el trimestre consolidado entre marzo y mayo ponen en alerta a 13 departamentos del país en los que se podrían presentar deslizamientos de tierras, derivados al clima.
El mes de marzo inició con una transición al primer periodo con más lluvias, particularmente, en las regiones Andina y Pacífica. De ahí que Chocó, Valle del Cauca, Cauca, Nariño, Antioquia, Caldas, Risaralda, Quindío, Tolima, Boyacá, Cundinamarca, Santander y Norte de Santander sean los departamentos más susceptibles a presentar deslizamientos, inundaciones y aumento de los caudales en los ríos. Esta situación también podría ocurrir en el Piedemonte Amazónico y el Llanero.
La entidad climatológica explicó que la causa de las emergencias durante este mes estaría asociada a que “los suelos en zonas inestables o de ladera presentan un aumento en su proceso de saturación”, lo que acelera la amenaza, en la medida en que se intensifican las lluvias que se tienen pronosticadas. Por su parte, Jairo Espejo, Director de la Comisión de Infraestructura de Transporte (Aciem), indicó que Colombia tiene una geología muy joven que al estar sobre la línea ecuatorial presenta cambios bruscos de temperatura que hacen que los suelos sean débiles y que en presencia de agua, ocurran este tipo de desastres.
“Pese a haber importantes mapas de riesgos y vulnerabilidad, muchas obras de infraestructura en el país se sitúan en zonas potenciales a la ocurrencia de deslizamientos y que no cuentan con los elementos para hacer una debida gestión del agua lo que hace que se presenten estos fenómenos”, anotó el director quien además dijo que los suelos montañosos y abruptos son los más susceptibles a presentar remoción de masa (deslizamientos).
Por lo tanto, las carreteras con estas características morfológicas como son las de Cundinamarca, Santander, Antioquia, Nariño, Boyacá y los Llanos Orientales tienen mayores probabilidades de ser afectadas durante la temporada invernal.
Es importante mencionar, que a la fecha, el Instituto Nacional de Vías (Invías) ya ha reportado contingencias en algunos corredores claves del país. Este es el caso de la vía de La Línea, que actualmente, presenta traumatismos entre los departamentos de Quindío y Tolima, debido a los derrumbes y la caída de árboles que se originaron en los últimos días por las fuertes lluvias.
No obstante, la situación más crítica la presentan cinco municipios de la subregión de Urabá que están en alerta por el incremento del caudal de los ríos, que en algunas localidades ya deja una serie de inundaciones y a varias comunidades incomunicadas, puesto que dependen del afluente para su movilidad. Antioquia ya completó 17 emergencias similares. No obstante, los estragos también se han evidenciado en otras regiones del país y han hecho que se tomen acciones a nivel local, como la declaración de alertas e incluso, de calamidad pública.
Por último, Espejo indicó que los viaductos y túneles son una medida a largo plazo que permitirá mitigar los deslizamientos en las carreteras. Sin embargo, mientras eso ocurre bastará con privilegiar la ingeniería preventiva más que la reactiva en el país. Lo que implica prepararse con antelación a este tipo de eventos que se pueden prever.
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