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Julio ha traído un aumento de precipitaciones entre 80% y 90% en varias zonas a pesar de que la temporada seca vasta finales de septiembre.
A pesar de que Colombia está en medio de una temporada seca, a lo largo de julio han aumentado las lluvias en varias zonas del país, incluso por encima de los promedios históricos que maneja para esta época del año el Ideam.
De acuerdo con Daniel Useche, jefe de Pronósticos y Alertas del Ideam, "julio hasta el momento nos ha mostrado algunas zonas con excesos de lluvia entre 80% y hasta 90% en sectores como La Guajira, Atlántico, Magdalena, Bolívar, Cesar; Antioquia, además del litoral de Chocó, Meta, Guaviare y Vaupés, entre otras zonas".
Según el funcionario, en estos lugares hay valores de anomalía con lluvias por encima de lo esperado para julio conforme los promedios climatológicos vigentes.
Lo curioso del caso es que este aumento en las precipitaciones se da al mismo tiempo en el que otras regiones del país sufren de sequías y grandes déficits de lluvias.
“En zonas especiales del sur de Tolima, Huila, Cauca, Valle del Cauca, Nariño, Boyacá e incluso algunas áreas del sur de La Guajira, Guainía y Vichada han sufrido déficit de lluvia. No ha llovido lo suficiente en estas zonas, se ha consolidado una situación más bien seca en estas áreas del territorio nacional durante julio”, precisó Useche.
Según explica el jefe de pronósticos del Ideam, este curioso fenómeno se presenta por el paso de ondas tropicales, las cuales han ocasionado el aumento de lluvias en ciertas partes del país, generando incluso vendavales.
“Estos sistemas atmosféricos a medida que van desplazándose de Oriente a Occidente por el área tropical nos genera condiciones de nubosidad abundante en gran parte del país. Esta nubosidad viene acompañada de lluvias persistentes y fuertes en algunas zonas de las regiones Caribe, Orinoquía, Andina; además de tormentas eléctricas también y en algunos casos vientos por encima de lo normal que favorecen el desarrollo de vendavales”, explicó.
En ese sentido, Useche agregó que “esta temporada no están seca como generalmente suele ocurrir para comienzos y finales del año y explicó a productores que “sólo hasta octubre y noviembre se acentuará la segunda temporada de lluvias en el país”.
De acuerdo con la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, producto de estas precipitaciones se han registrado 101 eventos en 77 municipios de 21 departamentos, siendo los mayores impactos en Norte de Santander, Arauca, Putumayo, Caquetá y Meta.
Frente a esta temporada inusual que se vive en el país, Eduardo González, director de la Ungrd aseguró que "la temporada seca es notoria hacia final y comienzo del año. Pero hemos venido recalcando que hacia mitad de año y mediados de septiembre tenemos una temporada de menos lluvias, pero no seca; inclusive hay muchas zonas de regiones de la Orinoquía y de la Amazonía en donde el comportamiento medio de las precipitaciones es monomodal y en donde aún para este período, es normal que se presenten volúmenes importantes de precipitación".
Así las cosas, González explicó que el beneficio de las lluvias que se están presentando "podemos asociarlo especialmente a las zonas en las que históricamente por descenso de las precipitaciones y otros aspectos logísticos y de infraestructura, se presentan problemas de desabastecimiento hídrico en fuentes superficiales; de igual forma, en zonas de La Guajira por ejemplo se favorece mayores volúmenes de captación en jagüeyes y en general de los acuíferos que son solución de abastecimiento de agua para muchas comunidades".
"El tiempo lluvioso ha disminuido de forma general la amenaza por ocurrencia de incendios forestales. Y aunque se sabe que un alto porcentaje de estos eventos se producen por actividades antrópicas, las condiciones secas con los vientos fuertes propios de la época suelen exacerbar cualquier conato de incendio que se presente", agregó.
"Sin embargo, - subrayó el director de Gestión del Riesgo, - son más los aspectos que no favorece, el tener cantidades de lluvia significativas en una época en la que históricamente descienden en cantidad y frecuencia. Los suelos se han venido saturando de forma importante en diversos sectores del país, lo que ha incidido para que aumente la amenaza por inundaciones, crecientes súbitas, deslizamientos de tierra y avenidas torrenciales. Normalmente para esta época, esa amenaza es mucho menor a la que se presenta en este momento y eso ha dado lugar a que prevalezcan alertas roja y naranja ante la probabilidad de ocurrencia de estos eventos teniendo en cuenta la lluvia antecedente y lo que pronostica el Ideam para los próximos días".
En ese sentido, para González "será muy importante conocer la predicción climática del Ideam para agosto y septiembre, con el fin de que desde los territorios se establezcan acciones preventivas particularmente en las zonas en donde se identifiquen condiciones de vulnerabilidad y consecuente riesgo".
La compañía señaló que esto mitiga su riesgo de refinanciación hasta 2028 y agregó que va en línea con los objetivos del plan financiero