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Los proyectos que se están ejecutando en la capital esperan ser entregados antes de finalizar la década. Mejorar la movilidad es la gran meta de las obras
En la capital se están ejecutando 25 obras, según el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU). Por ejemplo, las intervenciones en las vías alimentadoras del metro como la avenida 68 y la avenida Ciudad de Cali, que suman inversiones de más de $3,3 billones y que permitirán que la Primera Línea del Metro de Bogotá esté lista en 2027 para entrar en operación inmediatamente en 2028.
En otras obras en etapa de construcción destacan la avenida Ciudad de Cali, la extensión de la Caracas en el sur, la obra Laureano Gómez, paralela a la vía férrea y que prolonga la Avenida Novena hasta la Calle 193 y, por supuesto, el controvertido Corredor Verde de la Carrera Séptima.
Con tanto escombro por la ciudad, los citadinos se preguntan cómo será Bogotá cuando todas las obras culminen. ¿Cómo será la ciudad en 10 años?
Teniendo en cuenta que la mayoría de las obras están proyectadas a culminarse antes de 2030, hacia el año 2033 el ideal es que las 25 reportadas por el IDU estén entregadas.
Según indica José Stalin Rojas, director del Observatorio de Movilidad de la Universidad Nacional, Bogotá se verá como “una ciudad con cinco líneas de metro, con una red de bicirutas totalmente conectada e integrada al sistema de transporte público, y con varias avenidas y calles peatonalizadas (en cada localidad), con un área metropolitana conectada”.
La Primera Línea del Metro espera estar funcionando en 2028 y la Línea 2 empezará construcción en 2025 hasta 2032.
“Se verá como una ciudad con cinco líneas de metro, con una red de bicirutas totalmente conectada e integrada al sistema de transporte público, y con varias avenidas y calles peatonalizadas”.
“En 2022, el sector de obras civiles en Bogotá creció 95% a diferencia del sector a nivel nacional, dato que hay que poner en perspectiva porque el sector de las obras en Colombia se viene contrayendo”.
Sin embargo, el proyecto no está exento de obstáculos, pues pueden presentarse dificultades de financiación y sobrecostos. La cuestión es que la idea de un metro en Bogotá viene desde 1963 y hasta 2020 se empezó a construir como tal.
Y es que esos posibles riesgos que enfrenta el sector, como el aumento en los costos de los insumos, son fantasmas que seguirán persiguiendo a las obras de Bogotá. A este factor se suman las tasas de interés, pero este último factor tiene un panorama mejor, al menos este año.
Juan Camilo Pardo, economista de Corficolombiana, destaca que “en 2022, el sector de obras civiles en Bogotá creció 95% a diferencia del sector a nivel nacional”.
El analista también señala que hay que poner el dato en perspectiva porque el sector de las obras civiles en Colombia se viene contrayendo desde 2014 por la baja ejecución en construcción de carreteras. Es decir que, aunque la movilidad actual no es la mejor, la ejecución de las obras de Bogotá va mucho mejor que las del resto del país.
La perspectiva de ejecución de Corficolombiana es que Bogotá alcance un pico de ejecución de las obras entre 2024 y 2025. “Luego empezará a descender ese ritmo de ejecución. Sin embargo, los efectos sobre el mediano y largo plazo en crecimiento económico son supremamente importantes por una mayor conectividad, ahorro en tiempos y costos, además de los impactos en la productividad y la eficiencia de la ciudad”, resalta Pardo.
Y es que en ese largo plazo, las obras impactan otros sectores que se encadenan con la construcción como el comercio y la industria.
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